Almuerzo argentino
Ficha
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Datos de funciones:
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Prensa:
Valeria Franchi
Un domingo en familia
Como plantea Alejandro Grimson en su libro “¿Qué es el peronismo?” no se puede entender el peronismo sin entender el antiperonismo. Ambos polos de esta dimensión se complementan y no se puede explicar uno sin el otro.
Y es así, como este movimiento social y político legitimizado a mediados del siglo pasado, fue motivo de tensión en las discusiones familiares a la hora de la mesa: ¿Quiénes están de un lado? ¿Quiénes del otro? ¿Cuál es el proyecto de país que debiera llevarse adelante? ¿Qué representaciones de la identidad nacional surgen en ambos lados de la vereda?
Existen desde ya, en la historia del país, grietas que la precedieron como la de: “federales y unitarios”, “radicales y conservadores”, “liberales y nacionalistas”, y se podría seguir enumerando hasta la actualidad ejemplos como “pañuelos verdes y pañuelos celestes”. Sin embargo, el dilema (peronismo-antiperonismo) sigue resonando en la actualidad a tal punto que una reunión familiar, en estos días, puede traernos reminiscencias de un encuentro similar, setenta años atrás.
La obra se ubica en el año 1952 -año de la muerte de Eva Perón-, donde se reúnen dos hermanos con sus respectivas familias (esposas e hijos) para festejar el compromiso de la hija de uno de ellos. Por distintas posiciones políticas, se habían distanciado; pero, después de un tiempo, deciden intentar dejar de lado sus diferencias y llevar a cabo un encuentro familiar conciliador. Sin embargo, nada saldrá como se esperaba.
La dramaturgia y dirección de Bernardo Cappa es excelente: logra acertadamente apropiarse del espacio utilizando hasta el ultimo recoveco de la sala, con el fin de hacer participe al espectador del este encuentro familiar. Reforzando esta propuesta, a los espectadores se les ofrece algo de comer y de tomar, se los deja escoger un lugar al azar y ocupar, a su vez, sus propias mesas. Los intérpretes, por otro lado, en ocasiones se desplazarán entre el público con absoluta naturalidad, rompiendo la cuarta y achicando las distancias; hasta al más mínimo gesto se hace perceptible al ojo de quien mira con atención el desarrollo de la trama. Los diálogos entrecruzados, las interrupciones espontaneas, las pequeñas y grandes discusiones que se dan en la mesa se llevan a cabo con gran naturalidad y veracidad.
Las actuaciones son convincentes y solventes: tienen un nivel muy parejo, en cuanto a la definición del carácter de los personajes y el compromiso escénico con el que llevan a adelante cada línea de acción. El vestuario, de manera precisa, contextualiza y recrea al detalle los rasgos de la época.
La música en vivo, es interpretada por una destacada pianista, que, su vez, se convierte en un personaje más, dentro de la obra.
“Almuerzo argentino” es una cita impostergable por su maravillosa puesta, el nivel de las interpretaciones, la profundidad de un texto- absolutamente necesario por su actualidad y trascendencia-, y el humor con el que se aborda cada una de las situaciones y tenciones dentro de la escena.
Ficha:
Intérpretes: Rocío Ambrosoni (Helen), Trinidad Asensio (Alicia), Gabriela Dey (Rose), Amilcar Ferrero (Osvaldito), Pablo Fetis (Antonio), Yamila Gallione (Elsita), Franco Genovese (Robertino), Federico Lozano (Mark), Melisa Omill (Clara), Guillermo Osuna (Liborio), Horacio Pucheta (Alberto), Lucila Rosende / Lucía Rossi (Rita).
Dramaturgia y Dirección: Bernardo Cappa
Género: Comedia dramática
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