Espejo distorsionado

La noche de año nuevo en Balitimore, fiestas, risas, grupos de gente reunida, la calle poblada, terrazas en las que todo es diversión, fuegos artificiales por todos lados, iluminando el cielo y siendo cómplices de asesinatos fortuitos… el estruendo de las explosiones, sirvió para tapar los múltiples disparos, esos que mataron a 29 personas sin motivo y sin dejar rastro del responsable.

Así inicia la nueva y esperada película de Damián Szifron, que mantiene en vilo al espectador durante sus dos horas de duración. El autor y director de “Los simuladores” y “Relatos salvajes” (entre otras cosas), realizó esta producción hollywoodense, con todas las herramientas que eso le otorga, sin perder su esencia y toque.

Por un tema de cercanía Eleanor Falco (Shailene Woodley), una agente sin una experiencia muy abultada,  llega a la zona de los hechos y de a poco se va metiendo en el caso, su desempeño y forma de pensar, llamó la atención del responsable regional del FBI Geoffrey Lammark (Ben Mendelsohn), quién la convoca para que trabaje con ellos a fin de encontrar al asesino serial, que aparentemente es un fantasma.

La curva de la historia va de la mano con la del personaje de esta joven policía, que se siente interpelada por cómo piensa el homicida y es claro que tiene cosas en común con ella y eso le servirá para dar con él. Ella avanza y a medida que se acerca, también va recordando y reviviendo aspectos de su vida que la atormentan desde hace tiempo.

El relato es ágil y se sirve de una base acorde en relación a lo que se ve. Hay un juego de climas, que más allá del guion, se sustentan con la iluminación, que aporta mayor dramatismo y suspenso, no sólo por ser de noche, sino que en los interiores, se refuerza la idea de opresión por la urgencia, desde la técnica.

El responsable de la fotografía es Javier Juliá (quién fue parte de “Argentina 1985”, “El último Elvis” y “Relatos salvajes”), quien logra imágenes realmente impecables.

Eleanor tiene un protagonismo absoluto y todo se desarrolla en torno suyo, la actriz realiza un trabajo expresivo, minimalista y con un gran trabajo interno que se refleja en su interpretación sin exageraciones.

La película, que fue rodada mayormente en Canadá durante la pandemia, más allá de ser un thriller, cuenta con dosis de humor que según Szifron son necesarias para relajar y dar mayor credibilidad a los personajes y la historia.

Por un lado se enfrentan a un problema mayúsculo ya que no saben quién es el responsable, sus motivos, ni si volverá a atacar y por otro deben hacer frente a las exigencias internas de la fuerza y la política, que suman más presión.

La agente y el FBI irán jugando al gato y al ratón, siguiendo pistas y tratando de atar cabos para llegar al avezado tirador y llevar tranquilidad a la ciudad. ¿El secreto? tratar de pensar como él, más allá de no saber quién es, pensar como él, entender sus traumas, porque hace lo que hace y con esas herramientas hacer todo lo posible por estar un paso adelante… para eso está Eleanor.

Una película muy entretenida, atrapante, que responde a los cánones del género y marca un gran primer paso de Damián en la meca del cine.

Ficha:

Título en Argentina: “Misántropo”

Título en Estados Unidos: “To Catch a Killer”

Elenco: Shailene Woodley, Ben Mendelsohn, Jovan Adepo

Dirigida por: Damián Szifron

Escrita por: Damián Szifron y Jonathan Wakeham

Producida por: Aaron Ryder, Stuart Manashil, Shailene Woodley, Damián Szifron

Productores ejecutivos: Glen Basner, Alison Cohen, Milan Popelka, Michael A. Jackman, Russell Geyser, Jane Oster Sinisi, Clay Pecorin, Russ Posternak

Dirección de fotografía: Javier Juliá

Compositor: Carter Burwell

Casting: John Papsidera

Diseño de producción: Jason Kisvarday

Diseño de vestuario: Aieisha Li

Director de sonido: Sylvain Bellemare