Perspectivas oscilantes: más allá de las apariencias

«Anatomía de una Caída,» la última película francesa de Justine Triet, aparenta ser simple a primera vista. El título analítico no es una broma: se trata de la incansable disección de una muerte, un hombre que cae desde una ventana del ático en una cabaña alpina. Sin embargo, reducir la película a la mera exploración del incidente sería un error. Detrás de este evento, se esconde una historia más compleja y una verdad que va más allá de lo evidente, la cual capturó la atención del público en Cannes y le valió el prestigioso premio de la Palma de Oro.

La secuencia de apertura, sumerge al espectador en la vida en una pequeña cabaña en los Alpes franceses que, en principio, parece sacada de un cuento. Aquí, Sandra (Sandra Hüller), una exitosa escritora alemana, está siendo entrevistada por una joven estudiante (interpretada por Camille Rutherford) que la admira profundamente. El idilio se ve interrumpido por Samuel (Samuel Theis), esposo de Sandra, quien desde el altillo provoca a su mujer con música tan fuerte que obliga a poner fin a la entrevista. Minutos después, el hijo de la pareja, Daniel (Milo Machado Graner), regresa de su paseo por la nieve, acompañado de su leal perro, Snoop, ya que Daniel padece ceguera. Es en ese momento que Daniel descubre la impactante escena: su propio padre yace sin vida en la nieve.

A medida que la policía plantea la posibilidad de un asesinato, señalando a Sandra como única sospechosa y sometiéndola a tener que defenderse ante la corte, la película se transforma en un complejo proceso legal. La trama, que revela los problemas matrimoniales ocultos de Sandra con Samuel, desafía al espectador a ensamblar el rompecabezas con las pistas proporcionadas, manteniendo la intriga hasta el final.

Aunque el ritmo de la película puede resultar más lento para un espectador poco acostumbrado a este tipo de películas dramáticas y judiciales, la meticulosa construcción de la trama invita a prestar especial atención a cada plano, escena y pista, permitiendo que el público forme su propia hipótesis. Inspirada en clásicos como «Kramer vs. Kramer» y «Anatomy of a Murder», la película destaca como una obra única.

El guion, elaborado por Justine Triet y su esposo Arthur Harari, desentraña las complejidades de un matrimonio sometido a juicio, revelando capas y diferentes perspectivas que exploran la imperfección de la vida conyugal. La película no sigue el típico estilo de resolver un misterio, lo cual podría interpretarse como frustrante para algunos espectadores; sin embargo, decide adoptar otro tipo de punto de vista y desafiar la noción de «creer». Inspirada en muchos casos judiciales que aún hoy carecen de respuestas claras debido a la falta de evidencia concreta, «Anatomía de una Caída» cuestiona la forma tradicional de estructurar y contar historias.

El estilo cinematográfico de Triet agrega otra dimensión a la película, utilizando diferentes tipos de cámaras y momentos que simulan un enfoque «documental». La elección de dejar en la isla de edición algunos planos «movidos» o desenfocados busca recrear la sensación de los casos judiciales grabados para la televisión, convirtiendo el asunto no solo en un caso legal sino también en un fenómeno mediático. (Como sucedió hace menos de dos años, por ejemplo, con el caso Johnny Depp y Amber Heard) Justine Triet también opta por analizar la caída desde diferentes ángulos y puntos de vista, comenzando con la perspectiva de Sandra y luego incorporando la visión de Daniel, su hijo ciego, quien está magistralmente interpretado por el joven actor que lo encarna.

Cabe destacar que la película no es recomendada para personas sensibles, ya que se caracteriza por ser gráfica en sus diálogos y por abordar un conflicto matrimonial sumamente oscuro y fuerte. La trama expone crudamente las dinámicas de un matrimonio al borde del quiebre y narra la historia de un niño de once años, ciego, que enfrenta la dura realidad de descubrir si su madre fue responsable de la muerte de su padre. Además, la película crítica de manera clara aspectos como el machismo, las desigualdades en las relaciones, la sexualidad y las tácticas a veces agresivas de los abogados.

Quien sostiene la película sin dudas es Sandra Hüller, interpretando al personaje con su mismo nombre. Su actuación es extraordinariamente compleja, destacando no solo por el guion sino también por la destreza con la que la actriz aborda su personaje. Aunque en un primer vistazo pueda parecer un individuo frío, su mirada revela secretos y traumas vividos. Asimismo, el personaje encarnado por Swann Arlaud, su abogado y amigo de toda la vida, aporta una calidez especial y una dinámica renovada a Sandra, quien parece estar atravesando el peor momento de su vida. Este personaje introduce momentos de cierta alegría en una película que explora temas tan intensamente dramáticos.

El reconocimiento con la Palma de Oro del prestigioso festival de Cannes, no es casualidad; la película se distingue por su estructura única y su historia intrigante. «Anatomía de una Caída» destaca por su estructura única y su historia intrigante. Dirigida meticulosamente por Justine Triet, una cineasta que domina tanto el contenido como la forma de su narrativa. Indudablemente, esta obra cinematográfica no pasa desapercibida y acaba de recibir 5 nominaciones para los Oscar.

Ficha

Título internacional: Anatomy of a fall

Género: Thriller/Drama

Duración: 152 min.

Actores: Sandra Hüller, Swann Arlaud y Milo Machado Graner

Directora: Justine Triet

Fecha de estreno: 25 de enero de 2024