Memorias de un homicidio rural

Dos hermanos: un crimen. En una remota chacra formoseña, una matriarca tirana ha sido asesinada y sus dos hijos están bajo sospecha. Los testimonios de ambos se convierten en una oscura pieza teatral de título Aliento de lobos, de Lázaro Mareco.

El primer impacto lo produce una escena construida entre paja, elementos ganaderos y dos bancos, todo cercado por una cinta policial alrededor de una silueta de víctima en el piso. Los hermanos (Laura López Moyano y Francisco Bertín) narran, cada uno por su lado, pero de manera intercalada, los sucesos que llevaron al asesinato de su madre. No importa tanto la veracidad o la consistencia, sí la crudeza de su historia. Ambos convergen en un repudio a su progenitora por el supuesto homicidio de su padre, figura idealizada por ellos, mezcla entre idealización y trauma.

Lo que sigue es un relato desgarrado de dos jóvenes alienados por una serie de violencias invisibles que se ejercen sobre ellos: corrupción local, desarraigo, maternidad frustrada, diferentes situaciones más cotidianas de lo que aparentan. Las mismas alimentan un resentimiento silencioso que crece dentro de los protagonistas, con la fatalidad como desembocadura consecuente.

Para ello, los monólogos paralelos son de un intenso realismo. Ambos actores logran un aura lúgubre en sus palabras, potenciadas por el ambiente telúrico del agreste interior profundo de Formosa. Como acierto del libreto, los personajes narran secuencias aparentemente minúsculas, anécdotas inconexas entre sí que pintan un cuadro, una situación de desamparo en la que ellos habitan.

El diseño sonoro es un personaje más. La detallada mezcla entre diferentes silencios (rural y urbano) interactúa constantemente con los sospechosos del homicidio, que le hablan a un público cómplice. Mediante la mirada, la interpelación a la platea es directa y recurrente, pero el silencio es la única respuesta que prima, y ellos reaccionan ante el mismo, como una nueva violencia que se imprime en sus subjetividades.

Aliento de lobos es un breve relato de olvidados, un oscuro episodio teatral con mucha tela para cortar. En sus apenas 50 minutos, una variedad de temas sumamente cercanos y locales son planteados con sutileza, para que el espectador participe de esta reflexión colectiva llamada teatro.

Ficha

Actores:  Laura López Moyano, Francisco Bertín

Director: Lázaro Mareco