Una manipulación sutil

El Sr. Manningham (Matías Antonio Durini) es un psicópata encantador, la Sra. Manningham (Julieta Bermúdez) su esposa, ignora muchas cosas. Entre lo que desconoce, no sabe que una noche, veinte años atrás, en el mismo lugar que ahora comparten, fue asesinada una tía lejana de su marido y mucho menos en que condiciones ocurrió eso.

Quién si está al tanto, es el Sr. Rough (Gonzalo Alvarez) que había intentado veinte años atrás aclarar el asesinato cometido en la casa, lo reconoce, y desempolvando antiguas sospechas, decide investigar por su cuenta.

 

Doble de riesgo

Desde su estreno teatral en 1938, la obra Gaslight del autor Británico Patrick Hamilton ha tenido infinidad de versiones teatrales y dos preciosas adaptaciones cinematográficas.

La puesta en escena de Carolina Perrotta respeta el concepto y la temporalidad original del texto, creando un logrado espacio en tonos ocres y negro, y junto a un cuidado diseño de vestuario que remiten al Imperio Británico en la época de la reina Victoria.

La puesta tampoco intenta actualizar la conducta doméstica de los personajes. Trabajar un texto con tantas y tan distintas representaciones es siempre un riesgo doble.

Lo novedoso de este trabajo es el tono y ritmo de comedia con que está dirigido, creando una pieza dinámica y entretenida, trayéndola en este sentido y sin alterar en nada el texto original a una temporalidad mucho más actual.

Siendo esta una obra de intriga, tiene sentido que deje planteadas incógnitas abiertas a la interpretación. ¿La luz led que rodea por completo la escenografía, marca un límite estético?, ¿ dice que la representación está atrapada en su propia época?, ¿es una decisión arbitraria?

La edad real de los intérpretes, ¿puede desentenderse de la cronología ficcional?, ¿rompe algo?, ¿construye algo?

Placenteras tareas para el hogar que está puesta regala.

 

Ficha

Intérpretes:

Gonzalo Alvarez

Matías Durini

Julieta Bermúdez

Susana Miraglino

Fiorella Muzzo

 

Dirección:

Carolina Perrotta

 

Género:

Drama