Otra cara

El misterio de la vida y de la muerte siempre causó mucho interés a la humanidad desde tiempos remotos. ¿Cuál es el límite entre la vida y la muerte? ¿Cómo es posible dar vida a algo que está muerto? ¿Cómo puede el hombre a través de los descubrimientos científicos y adelantos tecnológicos manipular un cuerpo inerte para infundirle vida? Todos estos interrogantes son los que inspiraron la maravillosa historia que la autora Mary Shelley publicó en el año 1818 con el nombre de “Frankenstein o el moderno Prometeo”, que es considerada como la primera historia moderna de ciencia ficción. La novela cuenta la historia de Víctor Frankenstein un estudiante de medicina que obsesionado por develar los enigmas del alma humana realiza un experimento creando un cuerpo a partir de la unión de partes diseccionadas de diferentes cadáveres y dándole vida a una abominable criatura. El doctor Frankenstein al caer en la cuenta del horroroso resultado de su experimento decide abandonarlo. Pero la criatura, luego de haber cometido varios crímenes y aberraciones, vuelve a buscarlo diciendo que sólo le perdonaría su actitud de abandono y lo dejaría en paz cuando éste creara una mujer similar a él con la que pudiera entenderse y hacerse compañía mutuamente e irse a vivir a un lugar alejado de la gente.

La puesta en escena dirigida por Miguel Pittier comienza a modo de prólogo mostrando mediante un corto audiovisual (de muy buena calidad) realizado por Daniel y Emiliano Ferrando, la historia de este experimento. En el corto aparece el doctor Víctor Frankenstein y luego en escena, interactuando con la pantalla, aparece la “criatura”, ambos personajes interpretados por Gabo Correa. Durante el transcurso de la representación dialogan estos personajes, dando la sensación de un monólogo desdoblado, de una especie de “monólogo a dúo”. Para lo cual, es muy importante la sincronía y el ritmo en la interacción de ambos. A diferencia de la imagen que tradicionalmente tenemos de Frankenstein, en esta propuesta Gabo Correa aparece más humanizado, sin ningún tipo de maquillaje que denote su condición monstruosa y vestido de traje. Simplemente mediante su manera de moverse y de hablar reconocemos al icónico personaje.

Esta adaptación del clásico de Mary Shelley nos permite reflexionar sobre el ciclo de la vida y  la muerte, la naturaleza humana y sobre todo, pensar en los avances tecnológicos que nos dan la posibilidad de lograr cosas que en otros tiempos hubieran sido inconcebibles.

 

Ficha:

Elenco
Gabo Correa
Vicente Correa
Paloma Lipovetsky
Mora Sánchez Uzal, Agostina Malamorte,
Oriana Bosetto, Valentina Sánchez Uzal, Manuela Ruffini, Iara Odessky.
Dirección: Miguel Pittier