Un viaje de fantasía

Sin lugar a dudas, un viaje aporta experiencias, sensaciones, anécdotas, pero a vecs va más alla y pareciera que se está viviendo otra vida.

El personaje que compone Carolina Saade planea un viaje de placer a Francia junto a su madre, con la intención de disfrutar, conocer, compartir lugares juntas y volver luego con energías renovadas, como lo que pretende obtener cualquier persona que sale de viaje a pasarla bien. Sin embargo, Carolina vuelve sola.

La puesta en escena es alucinante; desde las sombras que se proyectan en las paredes, generadas por propios objetos que manipula Carolina mientras cuenta su vida, también recrea la relación con su madre mostrando carteles para que el público lea mientras ella gira en una tarima al fondo del escenario; el avión de juguete que sobrevuela en medio de la oscuridad y grafica el viaje a Europa junto a su madre, mientras suena una grabación de un piloto que le habla a los pasajeros a punto de aterrizar; el gato negro que aparece y la acompaña antes y después del viaje; son algunos ejemplos del gran trabajo del titiritero Gerardo Porión, que viste y acompaña el relato de Carolina, sumado a que también realiza un par de efímeras apariciones como actor de reparto, casi como si fuese un cameo de quien en realidad es el acompañante silencioso de la protagonista.

Además, la excelsa voz de ella a la hora de cantar, sus miradas cómplices y extrañas hacia el público, pudiendo pasar desde una euforia desmedida a la peor de las tristezas; y ni hablar su destreza a la hora del baile desenfrenado, mientras el impresionante juego de luces y los papelitos picados estallan sobre el escenario en una noche de boliche de música electrónica, que la llevan incluso a recrear escenas no aptas para menores de edad (no explícitas, por supuesto) junto a muñeco de goma espuma que parece real, producto también del enorme trabajo del titiritero.

Menos detalles es una obra que llena todos los sentidos. Un despliegue impresionante de recursos visuales y sonoros que visten a esta historia personal de superación, donde justamente el lenguaje verbal queda en un segundo plano. En este caso, y parafraseando una famosa frase, “mil imágenes (y sonidos) valen más que mil palabras”

Ficha

Actúan: Carolina Saade, Gerardo Porión
Diseño y realización de títeres: Gerardo Porión
Diseño de arte y vestuario: Paola Delgado
Diseño de iluminación: Fernando Berreta
Música original: Pablo Viotti
Autoría de canciones: Gustavo Tarrío – Pablo Viotti
Diseño de movimiento: Milva Leonardi
Realización de plataforma y zaranda: Agustín Valle – Francisco Arando
Diseño gráfico: Trineo
Prensa: Marisol Cambre
Comunicación: Rebeca Crespo Díaz
Fotos: Nacho Lunadei 
Fotografías de escena: Lau Castro
Asistente de dirección y escenario: Julián Giménez Zapiola
Producción general: Rocío Gómez Cantero – Valeria Casielles
Historia original: Rocío Gómez Cantero
Guion y dirección: Gustavo Tarrío

Género: Comedia dramática