La nostalgia de ser

Una prisión es el punto inicial de “El beso de la mujer araña”, situados en los 70 se encuentran Molina (Oscar Gimenez) homosexual, y Valentín (Pablo Pieretti) revolucionario, compartiendo una celda.

Molina, señor alto, con sus ojos claros y su difuminado atrapa desde su aparición ya que tiene una mezcla de inocencia pero sabiduría, tiene en sí mismo ternura, locura, sensatez, miedos y verdades que encierra en su figura. Con su caminar ondulante y sus modismos lleva el espectáculo de una forma magnifica, su decir tan vivido le da marco a lo que se está viendo; le da color a cada escena que transcurre ya que contándole a Valentín un film de hace muchos años el espectador logra viajar en eso que está diciendo.

Valentín por su parte, revolucionario, es un joven que desde su tozudez se muestra tal como es, reo, dejado, y lastimado corporal y emocionalmente. Con sus pelos desgreñados y sus ropas sin lavar tiene una herida que no sanara jamás; al igual que Molina, su decir es constante pero se diferencia ya que habla hacia adentro como ese dolor que lleva. Si bien es el revolucionario, es quien más tiene el corazón destrozado y teniendo la cuestión de género arraigada no quiere mostrar cómo se siente pero su voz si acompaña ese sentimiento.

Ambos cruzan sus caminos en la celda día tras día compartiendo todos los momentos desde Molina contando el film, hasta Valentín hablándole cuasi como compadrito a su compañero. La vida se muestra en el espectáculo como un camino arduo de vivir en donde hay vencedores y vencidos, estas figuras pueden ser vistas en los dos personajes, Molina debido a un acuerdo que tiene con gente de adentro del cuál su compañero de celda no está enterado se muestra como vencedor al informarle que pronto saldrá, Valentín, en cambio se muestra vencido al no lograr esa revolución que quiere hacer.

El amor aparece en ambos como una forma de sanar el malestar de estar encerrados hace tanto generando entre ellos un nexo que después será difícil de romper y en su final le da al espectáculo un halo de lealtad y paz inquebrantable.

Con dirección, música original y dirección de iluminación de Valeria Ambrosio, el espectáculo logra situar al espectador de forma sublime en lo que se está viendo, la escenografía de José Palumbo no deja nada situado al azar y hace que la obra no tenga ninguna falla. La voz en off de Héctor Fernández Rubio le da completitud a todo lo que se ve en escena. La actuación de Oscar Gimenez y Pablo Pieretti es admirable, lograr retratar de tal forma el antagonismo de los personajes y como conviven no da fisuras al espectáculo, el decir de ambos es magnífico ya que ninguno de los dos fuerza la actuación sino que se hace carne de las palabras, gestos y momentos que está vivenciando.

El beso de la mujer araña plasma libertad, lealtad, amor, sensibilidad, devoción y orgullo de ser haciendo que los espectadores se lleven el mensaje de que luchando por lo que uno quiere sin quebrantar valores puede llegar lejos o sentar bases de una realidad.

Ficha

Intérpretes: PABLO PIERETTI y OSCAR GIMENEZ

Dirección: VALERIA AMBROSIO

Género: DRAMA