Volpone

¿Qué serías capaz de hacer por el dinero?

Volpone -noble veneciano-, con la complicidad de su “fiel”  lacayo Mosca, finge estar en su lecho de muerte para sacar provecho económico de aquellos que como él, solo basan su felicidad en el dinero. Así es como juntos urden un plan mediante el cual tentarán a cada una de sus “incautas víctimas” con ser los futuros herederos de la fortuna de Volpone, generando una serie de situaciones en las cuáles el único beneficiado será el aparente moribundo. La avaricia hará que cada uno de ellos saque las peores de sus miserias a la luz, como entregar a una joven e inocente esposa a los deseos lujuriosos del simulador, o  desheredar a un hijo propio. Pero como sucede en ocasiones el brillante plan fracasa, y el cazador es cazado.
Esta brillante comedia escrita por Ben Jonson (dramaturgo, poeta y escritor inglés), fue estrenada en el Teatro El Globo de Londres en 1606. Mauricio Kartun y David Amitín hicieron esta estupenda versión, en esta ocasión dirigida por Jorge Nolasco. Un elenco de excelentes actores que juegan el juego de la comedia con absoluta fluidez y frescura,  cuyas composiciones llenas de gracia y vitalidad, dan un dinamismo que mantiene la tensión dramática y el ritmo necesario. Ricardo Galizia es el astuto, avaro, inescrupuloso y lujurioso Volpone, Rodrigo Cárdenas (su cómplice y lacayo, Mosca), Rubén Estevez (el vil letrado, Voltore) , Ricardo Cerone (el miserable Corbaccio, capaz de desheredar a su propio hijo), Pablo Sórensen (el joven Capitán Bonario), Jorge Schwanek (el codicioso Corvino, que a pesar de sus celos enfermizos cede a su esposa en pos de mejorar su fortuna), Sandra Criolani (la hermosa y frágil Celia, víctima de su esposo y de Volpone), Fernanda Sforza (Viola, la criada de Celia y Castrone, el criado de Volpone), Norma Suzal (la viuda caza maridos Doña Luppa), Daniel Muñoz (el Guardia Imperial), y Patricia Fimiani (la jueza, quien termina “impartiendo justicia”, en esta historia… o por lo menos “ajusticiando” a Volpone). La escenografía y el vestuario son de Alejandro Mateo.
“Volpone”, que en italiano significa “zorro”, es una magnífica ilustración de la avaricia de la cual es preso tantas veces el ser humano. En un mundo consumista donde el dinero pareciera ser la zanahoria que guía el destino de los hombres, y en muchos casos se presenta como el único camino a la felicidad dejado de lado los verdaderos valores que hacen a la vida, es necesario y hasta imprescindible replantearse el lugar que verdaderamente se merece en nuestra existencia.

Ficha: