La verdad inasible

Porgy se encuentra en un momento crucial de su vida. No es muy mayor, alrededor de 55 años, pero se siente cansado de batallar cotidianamente en su negocio. Las cosas no van bien y debe conseguir un inversionista para no bajar las persianas. Es temprano, muy, el alba, y sin embargo está listo, sentado en el recibidor del hotel en el que pasó la noche, tenso y ansioso para ir a la reunión en la que su futuro se definirá. ¿Para qué todo? ¿qué es ese hondo hueco que ocupa su pecho? entonces entra Clara, una mujer algo mayor que él pero muy atractiva y sensual, que no ha terminado la noche aún; está vestida de fiesta y algo alcoholizada. Se encuentra abrumadoramente sola, hastiada del siempre lo mismo y ve en Porgy una oportunidad de encuentro. Desplegará una inteligente estrategia de manipulación, coqueta y desvalida, hasta conseguir que él baje sus defensas, le confiese sus pesares y se entregue a un juego que tendrá un desenlace totalmente inesperado.

Por otro lado se encuentra Bess, la esposa de Porgy, que es la narradora de los acontecimientos y cuyo monólogo aparece fragmentado intercalado con distintos momentos de las escenas en el hotel. Es una mujer destruida, que una y otra vez trata de armar la historia en su cabeza. En la soledad y el desconsuelo, reencuentra una compañía que tenía olvidada: el piano (ejecutado en escena por Sergio Lozano). En él plasmará su obsesión por encontrar razones y su desencanto por no obtenerlas.

Una propuesta que se destaca por la calidad del trabajo actoral: Julia Funari (Clara) y Pablo Mónaco (Porgy) hacen un contrapunto perfecto; las reservas de él, su pudor, su angustia y la avasalladora, pero adorable, decisión de ella de no dormir sola, descartada; un juego de tira y afloje que tiene algunos momentos tiernos y otros muy divertidos. Mercedes Mastropierro (Bess) es esa compañera incondicional que está harta ya de todo, pero siempre está, confiable y aguantadora; su rol tiene la difícil tarea de sostener un alto nivel de emocionalidad y desesperación a lo largo de toda la obra. La escenografía de Víctor Salvatore resuelve de una manera económica y eficaz los distintos espacios.

Una obra profunda e intensa, escrita y dirigida por Fernando Lozano, en la que el tradicional esquema de triángulo amoroso se convierte en un medio para explorar la angustia existencial.

Ficha

Actores: julia Funari, Mercedes Mastropierro y Pablo Mónaco.

Músico: Sergio Lozano

Director: Fernando Lozano

Género: Drama