Los dos Papas

Los dos Papas

Que las lágrimas solo sean de alegría.
“Los dos papas” es la historia del recorrido paralelo que realizan Joseph Ratzinger (Anthony Hopkins) y Jorge Bergoglio (Jonathan Pryce y Juan Minujín) desde el año 2005 hasta algo después de era Francisco.
Esta película dirigida por Fernando Meirelles aborda la vida de estas dos figuras históricas desde sus costados políticos, pero también humanos y filosóficos.
Los encuentros entre los dos papas nunca fueron constatados en la realidad y, la verdad, a esta altura poco importa. El director encontró una forma creativa y eficiente de retratar a dos hombres contrapuestos y cercanos a la vez.
Desde el comienzo queda muy clara la tensión en la relación de ambos personajes lo cual, de alguna manera, es un reflejo de las posturas internas de la Iglesia Católica. Y ese es el núcleo de todo el guión, contar a través de dos nombres propios las causas y consecuencias de la transformación de una institución religiosa global.
Para narrar “Los dos papas” la filmación tuvo que recorrer cada una de las locaciones en las cuales todo ocurrió. Desde los barrios vulnerables y las sierras cordobesas en los cuales Bergoglio fue párroco y misionero hasta el mismísimo Vaticano por dentro en plena era opulenta de Ratzinger.
Una mención aparte merece los encuentros, imaginarios o no, entre ambos hombres. El duelo de actores con primeros planos que llevan a una atmósfera teatral es un lujo cinematográfico.
En el caso de Juan Minujín, el argentino tuvo una tarea enorme. Por un lado, su interpretación de un joven Jorge Bergoglio, desde sus inicios en el barrio de Flores al liderazgo jesuita y desde allí al exilio post el gobierno de la junta militar. Pero, además, y aquí aplausos de pie, destaca en el rol cuya versión mayor realiza Jonathan Pryce.
En relación a los climas y los tiempos la cinta pone en práctica viejos recursos, pero efectivos. Blanco y negro y sepia para el pasado, dependiendo el momento en particular. Mientras tanto, todo lo que transcurre en Vaticano, Italia y Argentina del 2005 en adelante es una fiesta de color.
Con el sonido también hay juegos de volúmenes dependiendo de los emociones y sensaciones de los personajes. A este artilugio lo acompañan los tonos de voz de las actuaciones de nivel superior.
En el caso puntual de las escenas en las cuales Jonathan Pryce, en la piel de Bergoglio o ya como Francisco, debe hablar en español y en italiano todo fluye a la perfección. Incluso el acento en inglés durante las escenas del Ratzinger de Hopkins le dan un toque de credibilidad especial.
“Los dos papas” es una obra de arte del año 2019 que en los últimos días recuperó visualizaciones en plataformas y enhorabuena. Para quienes tuvieron la oportunidad de verla en su momento, la re visualización, en verdad cobra otro sentido.
Se trata de una película, sí, pero bien puede ser una pieza histórica o material educativo. Una manera muy didáctica y entretenida de revisitar los archivos de la política y de la religión de Argentina y del mundo disfrutando de gigantes de la actuación.
Mientras tanto, para las personas de fe, puede que la emoción sea inevitable. Ante la reciente partida de Francisco, también se trata de un viaje al costado más sensible de un referente de multitudes. Por todo esto, vale verla por primera vez o nuevamente, a modo de homenaje y, en sus propias palabras “que las lágrimas solo sean de alegría”.
FICHA
Dirección
Fernando Meirelles
Guion
Anthony McCarten. Biografía sobre: Papa Francisco, Pope Benedict XVI
Música
Bryce Dessner
Fotografía
César Charlone
Elenco
Anthony Hopkins
Jonathan Pryce
Juan Minujín
Sidney
Lisandro Fiks
Luis Gnecco
María Ucedo
Thomas D. Williams

Categorías: Reseñas de cine

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