Cuando nada sale como se planeó
¿Quién tiene la culpa de una pareja en crisis, sus integrantes o todos los que opinan alrededor?
Una historia sobre crecer, la responsabilidad y las relaciones, entre otras cosas, que nació en las tablas y gana vuelo y algo de realismo en la pantalla grande. ¿Valdrá la pena? se verá más adelante.
Un viaje de amigos a Córdoba para desconectarse de la rutina, desencadena un terremoto en la vida de cada uno de los que participaron. Especialmente en uno de ellos que va a cumplir años, por lo que su mujer está preparando una fiesta sorpresa con todos sus amigos para tratar de salvar su pareja cuya crisis se acrecentó después del nacimiento de su primera hija.
Sólo que el plan comienza a salir mal a medida que van apareciendo los amigos, que en lugar de sumar restan. Uno que quiere ver el partido, otro que no lleva a la novia para que sus amigos no hablen de más, una de las esposas que no para de criticar todo lo que ve y una novia, más licenciosa, que también hace referencia al viaje a Córdoba del que no se debía saber que había participado.
Para empeorar las cosas, el cumpleañero que no llega a su propia casa y tampoco contesta el teléfono. Todo esto es una olla a presión que la dueña de casa intenta aguantar pero que más temprano que tarde va a estallar afectando a todos los presentes. La pregunta es quién quedará en pie después que esto explote.
Es interesante la relación de los personajes, al igual que los diálogos, que están muy aceitados, cosa que seguramente viene de tantos años de representación escénica que se potencia y gana mayor contexto por el pasaje al formato cinematográfico.
Otra cosa que también suma el cambio de formato, es que le da mucho más aire a esta historia. En este caso se puede ver en pantalla el famoso viaje a Córdoba, aunque sea una pequeña parte de él, pero que agrega mucho a la historia. Y también que está haciendo el cumpleañero.
Esto le suma otra capa a la historia y construye un mundo de una manera que sólo permite el formato fílmico. Si bien por ese lado es beneficioso el cambio de formato, hay otros puntos en los que no es tan así, por ejemplo en el final, que queda un poco “estirado”, quizá, con un mayor ajuste al nuevo lenguaje, sería más efectivo.
En cuanto a la temática abordada, son interesantes y complejos los temas que trata. Las responsabilidades, los relaciones humanas, el pasar de los años, el machismo. Especialmente porque lo hace desde el género de la comedia dramática y que porque se trata de una película argentina donde estos temas no son los más habituales.
Es una gran apuesta y está bien logrado, sin duda vale la pena ir a verla.
No sólo es recomendable para los que están en pareja, o a los que tienen hijos, o mantienen una amistad desde la infancia, sino a los que tratan de llevar adelante todo eso y tratan de hacer que eso funcione, quizás pasando por alto algunos detalles para no tener que enfrentarnos a ciertas realidades.
Ficha
Título Original: La culpa de nada
Año: 2024
Duración: 97 min.
País: Argentina.
Dirección: Victoria Hiladilo
Guion: Victoria Hiladilo
Producción: Manuel Vignau, Victoria Hladilo, Lucas Schiaffi, Pablo Dana
Dirección de fotografia: Lucas Schiaffi
Montaje: Paula Rupolo ADF, Victoria Hladilo
Asistente de Dirección: Estanislao Buisel Quintana
Música: Gabriel Chwojnik
Sonido: Gabriel Ruiz Díaz, Lucas Echeverria, Ignacio Viano
Dirección de arte: Margarita Tambornino
Maquillaje: Paula Righi
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