Que bonita vecindad

Un edificio cualquiera de zona norte. Una reunión de consorcio. Una puerta abierta. Un garaje. Un intruso. Un asesinato. Desconcierto…

La escena arranca con un cuerpo sin vida en el piso, tapado, en medio de un grupo de vecinos que debate que hacer, todos saben quién es, porque lo mataron, quien y porque … al menos eso creen.

Un espectáculo de humor negro de la talla de Juan Paya, en medio de discusiones y titubeos, estas personas irán sacando a la luz diferentes aspectos de sus personalidades, realmente la diversión está asegurada.

Muy buenas actuaciones, comenzando por Graciela Stefani quien tiene la mayor carga de texto y lo resuelve de manera impecable, su personaje (Emilia) es tan divertido como insufrible, una presidente de consorcio reiterativa y verborrágica, gran construcción.

Vuelve un personaje ya conocido por quienes siguen la obra de Paya, él es Bruce (Federico Baron), un cheto al que hay que seguirle el tren, siempre muy arriba, el más canchero de la cuadra, muy divertido también.

Por su parte el mismo Paya (Camilo) realiza una gran actuación, deja de ser el chico bueno y recatado para reflejar el título de la obra, su personaje es un sacado, un violento que lleva a cabo sin exageraciones y sin caer en el cliché, muy buen trabajo.

La realidad es que todos los integrantes del elenco está muy bien, Andres Rovetto, se pone en la piel de Claudio,  un “new age” desopilante. La Payuca del Pueblo (Alexandra) e Ima Rodríguez (Matias)  son un dúo dinámico (hermanos ellos), elucubran cosas, pero a la vez son útiles a la causa ya que tienen contactos que les pueden dar una mano con algunas triquiñuelas.

Leticia Siciliani  (Leticia) compone a una chica alterada, un poco inocente, otro tanto insegura, enamoradiza, es ese personaje que puede hacer que todo salga mal. Por último Flor Berthold  (Mariana), quien llega para poner los puntos sobre las íes y ayuda a poner algunas cosas sobre el tapete.

Todo esto se da en la cochera del edificio y la escenografía hace que realmente creamos que es allí donde están los personajes, el diseño de la misma incluye desde las luces de dudoso funcionamiento hasta un auto que se asoma, no hace falta el uso de la imaginación para construir el lugar, cada detalle está en el escenario.

Detrás de todo, están la mano y la cabeza de Héctor Díaz (director) quien conjuga todos los elementos con los que cuenta y las particularidades de cada actor para lograr ritmo, y crear el clima que la obra requiere; la tensión, la incomodidad, los nervios y el humor entrelazados, cada uno en su cuota justa.

Un espectáculo no apto para quienes se espantan fácilmente, con un humor ácido que refleja los recovecos de los seres humanos, habla a viva voz de algunas cosas que socialmente no se dicen, como en cada producto de Juan Paya, la entrada es un pasaje a un buen momento. Esto es así, hay un cuerpo, el responsable esta entre nosotros y sabemos quién es, ahora… ¿Qué hacemos?

Ficha:

Con: Federico Barón  Flor Berthold Juan Paya Payuca del Pueblo Imanol Rodriguez Andres Rovetto Leticia Siciliani Graciela Stefani
Dirección: Héctor Díaz