El refugio de las palomas

Paula festeja el cumpleaños de su hijo, contratan a un animador y junto a su marido organizan el evento. La madre le cede a la empleada doméstica para que le ayude. Su padre, una persona mayor, con un importante deterioro cognitivo, también estará con ella entorpeciendo de ratos, este ir y venir de una mujer que no puede con todo. Se esfuerza por hacer que las cosas funcionen a la perfección. Pero la relación conflictiva con su madre, la demanda del padre, el mal trato de su esposo, hacen que se sienta desbordada. La tensión se manifiesta en una contractura que atraviesa su espalda. Y es en esos instantes, donde se detiene, que Paula desenchufa su cabeza para sentir su cuerpo y conectar con sus necesidades y deseo. La vida es breve, parece decir la frágil figura de ese padre que mira desde una ventana un conjunto de palomas que lo obsesiona, sabiendo que el paso irreversible de tiempo, acecha detrás de la fiesta donde se celebra la vida.

La dirección junto con la dramaturgia está a cargo de Victoria Hladilo, quien a la vez asume un rol protagónico en la historia. La puesta en escena es dinámica y precisa. El ritmo de la obra no decae en ningún momento. Las situaciones se juegan a fondo, generando climas y tensiones que fortalecen la trama. El humor está siempre presente incluso en las circunstancias más dramáticas de la obra. Son destacables las actuaciones de cada uno de los integrantes del elenco, que logran encarnar con veracidad sus personajes, en sus roles perfectamente definidos. Las luces, el vestuario, la escenografía no dejan escapar ningún detalle. En su conjunto, la obra atrapa al espectador y captura su atención de principio a fin. Siendo una propuesta que conmueve, nos hace reflexionar, reír y pasar un buen momento, se convierte en una cita ineludible de la cartelera teatral.

Ficha:

Actúan: Roxana Randón, José María Marcos, Emiliano Díaz, Victoria Hladilo, Mercedes Quinteros, Darío Miño.
Dirección: Victoria Hladilo