Crónica de una noche mágica

Avenida Corrientes, llegando a Bouchard, las veredas se ven colmadas por vendedores ambulantes con mantas en el suelo y muchos curiosos viendo sus productos. Circula gente de todas las edades, hay quienes están en familia, con amigos o solos, muchos van disfrazados o vestidos para la ocasión (según quien vea). Una gran masa de gente camina hacia el Luna Park, allí los espera un concierto muy especial.

Al entrar al estadio, ya en el hall, hay aires de otras tierras, un pequeño espacio que invita a entrar en otro mundo, contra una pared medio carrito con una valija y una lechuza blanca, arriba un cartel: Plataforma 9 ¾ y todos los que pasan por ahí, saben muy bien a donde van a llegar una vez que atraviesen el muro.

El gran salón del Luna, tiene el escenario preparado, muchas sillas e instrumentos y una pantalla gigante encima de donde ya se vislumbra, estará ubicada la orquesta, bandera de las cuatro escuelas y a los lados escobas colgando y aros de quidditch. En el ambiente se siente alegría, emoción, la fiesta ya comenzó.

De a poco llegan los músicos, la Orquesta Académica d Buenos Aires se ubica en escena, afinan sus instrumentos, mientras en la gran pantalla se puede ver un back de como se realizó esta banda sonora.

Luego llega el director con su impecable corbata de Gryffindor, un muy simpático John Jesensky, quien llego desde EEUU para darle vida a este show; el habla con el público e invita a “portarse mal”, pide que todos se expresen libremente a favor o en contra de lo que van viendo, de los personajes y situaciones que tan bien conocen y así da comienzo a este viaje, que va directamente al mundo de Harry Potter.

El Concierto de Películas de Harry Potter que se inició en junio de 2016 es otra experiencia mágica de J.K. Rowling’s Wizarding World y está programado para incluir cientos de actuaciones en más de 35 países de todo el mundo hasta 2018.  Finalmente llego a nuestro país, donde realizarán 2 conciertos únicamente, los cuales tienen plateas agotadas.

La novedosa propuesta es simple y muy efectiva: una orquesta toca en vivo la banda sonora, mientras en la pantalla gigante, se proyecta la película. Pero claro, lo simple es solo la propuesta, llegar el sincro perfecto que logran, definitivamente es un gran trabajo.

El trabajo de la numerosa orquesta es maravilloso, cada acorde se hizo sentir y se podía ver a los músicos disfrutando, esa alegría la llevaban a sus instrumentos y se hacia notar. La dirección de Jesensky corría por el mismo lado, se lo veía entusiasmado y cuando se le podía ver de perfil, siempre se vislumbraba su sonrisa.

El público hizo caso al director, tanto así que más que una película, parecía teatro, donde cada personaje que aparecía era vitoreado o abucheado, cada escena era celebrada con aplausos y chiflidos, cada encantamiento que se veía en la pantalla, era coreado por todo el Luna… evidentemente fue una fiesta.

Evidentemente la idea de CineConcerts y Warner Bros. Consumer Products de realizar este tipo de conciertos con películas aclamadas por el público, es un gran acierto y los fans, lo agradecen.

Vale resaltar que también es una hermosa excusa, para acercar a quienes no frecuentan este tipo de espectáculos, a un maravilloso concierto en vico, que hoy ejecuta la inconfundible y majestuosa música de John Williams, pero queda la puerta abierta para conocer otras piezas.

Un espectáculo disfrutable por completo, emoción, alegría y música ejecutada deliciosamente, garantizado que nadie saldrá del Luna sin una sonrisa… es magia.

 

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Harry Potter y la piedra filosofal en Concierto