Cualquier semejanza con la realidad es pura coincidencia

Clifford Odets, conocido dramaturgo por su fuerte compromiso con la realidad sociopolítica de su país, escribió esta pieza teatral en 1935 en medio de lo que fue la gran crisis económica de los años ´30 en Estados Unidos. Por aquellos días, la quiebra y el cierre de bancos y empresas dejaron una gran masa de trabajadores desocupados y obviamente, trajeron aparejados hambre y pobreza – especialmente en los sectores obreros-. Todo esto fue el inicio de un gran movimiento donde los trabajadores lucharon por sus derechos y que, junto con la sanción de la ley Nacional de Recuperación, hicieron que se reconociera la sindicalización de los obreros y la negociación de los convenios colectivos de trabajo.

Ahora, 80 años después, en una sala porteña del ámbito independiente un grupo de obreros/actores  vuelve a recibir al público en medio de una asamblea. El contexto cambió, la realidad no es la misma, sin embargo en muchas de las escenas la gente se podrá ver claramente reflejada con situaciones que se tornan familiares por estos días. Así es como transcurre la obra, con los espectadores como parte de un todo por momentos y como observadores por otros.

Hugo Alvarez, director de “Esperando al zurdo”, ha sabido conjugar la riqueza de los textos con muy sólidas actuaciones de un elenco numeroso. La acción va transcurriendo entre un presente de asamblea en un ámbito acotado, con escenas que muestran cómo llegó cada uno de los obreros a esta situación de reunión y qué motivó su presencia allí. Todo el espacio de la sala está muy bien aprovechado para contar cada historia, que con juegos de luces y pequeños cambios de vestuario, muestran el cotidiano de cada personaje. Las transiciones además, están acompañadas con la hermosa voz de Liliana Muñoz que a través de la poesía de las canciones, sigue completando el relato de la época.

En esta particular asamblea de taxistas, todos esperan al Zurdo, personaje del que hablan como la persona que los representará en su lucha. Cada personaje tiene encima una historia de desventuras, de sueños no concretado pero a todos los une el deseo de salir de ese presente angustioso. No falta ningún condimento: un empresario inescrupuloso, un hombre íntegro que no acepta un trabajo con objetivos dudosos; un padre de familia que quiere un futuro para sus hijos; una esposa que lucha por sus derechos de mujer; un médico agobiado por las presiones y otro médico devenido taxista; un joven que quiere casarse y una chica con sueños de mejor vida; un sindicalista mentiroso y corrupto con el matón de turno; dos hermanos enfrentados por la traición y el Zurdo que sigue sin llegar.

Actores de mucha experiencia y talento, cada uno luciéndose en su personaje y haciendo que toda la obra sea una propuesta atractiva e interesante, una invitación al público para reflexionar sobre las similitudes que se pueden seguir observando y contando a través de un relato de principios del siglo pasado.

Ficha:

Elenco
HARRY FATT – Alejandro Hodara
GUARDAESPALDAS – Cepeda
JOE MITCHELL – Gustavo Bonfigli
EDNA MITCHELL- Tina Ottaviano
MILLER – Lisandro Berenguer
MR. LAFAYETTE – Hugo Alvarez
FLORENCE – Tina Ottaviano
PETER – Emiliano Boidi
CLAYTON – Julio Pallero
CLANCY – Héctor José LaPorta
DOCTOR BARNES – Luis Marangon
DR. BENJAMIN – Pablo Faletti
KELLER – Leonardo Odierna

3 MIEMBROS de SOLDADOS DEL AMOR
(Lili Muñoz – Julio Pallero – Luis Marangon)

Puesta en escena y dirección general: Hugo Alvarez