Mundo gitano.

Estamos en Sevilla, en la taberna de Lillas Pastia y Frasquita de Pastia (Santiago Palmeiro y Marina Spataro), hogar de una familia de buena cepa gitana. Lillas y Frasquita llevan juntos el negocio en donde se come, se bebe y se disfrutan espectáculos artísticos… pero en donde también se ejerce la prostitución, se comercializa droga y se trafica ilegalmente.

Tentado por este por este escenario festivo y dispuesto por su parte a tentar con una oferta irresistible que desata la discordia en la familia, llega un día a la taberna el productor “norteamericano” Escamilo (Carlos Maccio). El productor está buscando una nueva actriz para llevar al estrellato en una próxima película de Hollywood.

Pero ¿Quién es este Escamilo? ¿Qué secretos guarda? ¿De dónde salió? A nadie parece importarle, toda Sevilla está empapelada con su foto y su proyecto; eso es suficiente credencial.

El anuncio del casting es el puntapié inicial que desata la competencia entre Carmen (Annie Escobar) y Mercedes (Erica Hardt), ya que ambas anhelan ser la nueva estrella, la nueva musa. En la competencia reinan los celos, los rencores y -agravado por el hecho de que comparten su sangre- las pasiones que las guían hacen estallar los secretos de esta familia gitana.

Carmen es libre, le gusta sentirse así, no permite que traten de ponerle límites; es una rebelde y no va a aceptar los celos ni los planteos de su nuevo amor, José (Sebastián Olano), el policía que se la ha jugado por ella.

La obra es, igual que el argumento, un estallido. El maravilloso vestuario con sus colores ardientes y las danzas (que no mezquinan su presencia) son alegría y son drama. La participación de Franco “Pipo” Bortondello hilvana la obra con estas dualidades. Estallan la guitarra, el humor, las potentes voces gitanas que se expanden y ocupan además del escenario los pasillos, nos sumergen en ese universo tan particular de Andalucía.

Esta música altisonante acompaña el revuelo en el que todos los personajes se suman al sueño del estrellato.

Cada uno de los integrantes de esa familia andaluza siente pertenecer a un mundo que se le va derrumbando, cada uno busca la salvación en una especie de “sueño americano”, un arquetipo de bienestar y confort que tiene formado en sus ideales. Ellos ponen su empeño y sus fantasías tras el productor de Hollywood, creyendo ver en él, el comienzo de algo nuevo y mejor.

Inspirada en la ópera “Carmen” de Bizet, “Carmen, la única” es escrita y dirigida por Juan Carlos Malpelli. Nos recuerda tantos lazos y tan diversos que hay entre el pueblo español y el argentino. “Carmen, la única” es un mundo gitano en Buenos Aires.

 

Ficha:

Autor y Director: Juan Carlos Malpeli.
Elenco: Marina Spataro, Erica Hardt, Annie Escobar, Carlos Maccio, Santiago Palmeiro, Pipo Bortondello, y Sebastián Olano.