Nostalgia activa

Suena una melodía, suave, lenta y nostálgica: “Nocturno 9” de Chopin. Susy se acicala, mirándose al espejo pone maquillaje en sus mejillas contraídas por la sonrisa que le generan los recuerdos de su padre, un anarquista intelectual exiliado de la España franquista, en ese momento otro de los personajes empieza a deambular por la casa escribiendo obras de teatro, mientras se queja de su desarraigo pero sin dejar su actitud tierna e inocentona.

Mientras se prepara rememora otros tiempos y cada uno de esos recuerdos toma forma, cada uno a su tiempo, es así que junto a ella se pueden ver a sus padres, su hermana y la pareja de esta. Su mamá era profesora de piano, simpatizante del socialismo. Su hermana era bailarina de ballet y el cuñado, era un trompetista autodidacta que  ideológicamente tomaba cosas de ambas partes, por lo que podía estar de acuerdo con el suegro y con la suegra sumando el condimento de una actitud seductora.

Es 17 de octubre de 1981, se cumplen 132 años de la muerte de Frédéric François Chopin y ella se está embelleciendo para ir a la plaza de Villa del Parque, en la que se encuentra el busto inaugurado en 1944 como tributo al artista, para rendirle un homenaje.  Allí se encontrará con un policía de su barrio, que aparte es su vecino de toda la vida y ambos, darán inicio a la conmemoración.

La obra se divide en dos líneas temporales, por un lado el presente de los 80 y por otro, se hará un viaje al pasado, a los años 40 a través de los recuerdos de la pareja protagónica.

El director resolvió separar las épocas desde lo visual, partiendo el espacio y generando dos escenografías diferentes, apoyándose también con el diseño de luces, dejando los colores más cálidos y amarillos para el pasado y la luz blanca para el presente. De esta manera, con el simple desplazamiento de los intérpretes, queda claro a qué momento se refieren en cada escena.

Otra característica de la puesta es que está guiada rítmicamente, por las canciones de Chopin, eso obliga a los actores a actuar acompasadamente, si bien esto podría ser complejo, lo resuelven muy bien.

La pieza teatral de “Tito” Cossa, dirigida por Norberto Gonzalo cuenta la historia de la clase media encarnada en las hermanas y los recuerdos, sirven para mostrar las diferentes corrientes ideológicas de la época en materia política y como influenciaban a la protagonista en el pasado, mostrando también lo que pasa en la actualidad.

Un espectáculo que usa de excusa la música del compositor polaco, para hacer un recorrido por la vida de sus protagonistas y las memorias para hablar de política en una época en la que no se podía.

 

Ficha

Con: Stella Matute, Amancay Espíndola, Claudio Pazos, Daniel Dibiase, Leonardo Odierna, Brenda Fabregat
Dirección: Norberto Gonzalo