En un pueblito de Italia…

En el preciso momento en el que Doña Sol (Gabriela Genovese) y Don Luna (Luciano Mansur) ponen un pie en la sala comienza una vorágine de melodías, voces y colores. Ubicados en los extremos del escenario, van narrando la historia mientras permiten ver, entre alivios cómicos e interacción con el público, cómo evoluciona su relación. Ambos tocan el piano, a veces también el bandoneón y cantan.

Entablando una contraposición del día y la noche comienza la historia de Piero y Colombina, un panadero y una lavandera, que mantienen una gran amistad desde muy pequeños, pero que no terminan de confesar su amor mutuo. Un día, de repente, aparecerá Palettino, un artista nómada que será el tercero en discordia de esa relación. Los tres títeres que los representan simulan expresiones complejas gracias a los dos intérpretes (Frida León Beraud y Hernán Matorra) ubicados en el centro de la escena. Ambos a modo de hadas madrinas le otorgan vida a los títeres y van interfiriendo en sus historias.

Con mucha versatilidad y atención al detalle lograron convertir dos simples casas en dos pequeños mundos dentro de la puesta en escena global que presenta una explosión de colores y texturas visuales. Cabe destacar el buen uso de los recursos audiovisuales mezclando los títeres con caricaturas para completar la historia. Todo lo visible cumplía más de una función.

La obra de Gastón Marioni es la adaptación de una obra holandesa basada en una novela de Michel Tournier donde logran tocar de forma sencilla temas profundos como la amistad, el amor y la construcción de vínculos. Mezclando títeres, caricaturas, teatro físico y musical logra crear personajes adorables y cercanos. Piero es una historia mágica con momentos de ensueño que presenta capas de profundidad que la hacen interesante de ver tanto para adultos como para niños.

 

Ficha

Actúan: Hernán Matorra, Gabriela Genovese, Frida León Beraud, Luciano Mansur

Dirección: Gastón Marioni

Género: Musical / Infantil