Que no se pierda el cuento

“En busca de ‘El pulpo está crudo’” es un excelente musical basado en el libro homónimo de Luis María Pescetti.

Lauti (Hernán Matorra) llega tarde al ensayo de la banda preocupado porque se le ha perdido un cuento, y tiene la firme teoría que dice que “cuando un cuento no es contado cae en el olvido y es olvidado”. Así es como los actores y actrices (Hernán Matorra, Sol Bloise, Roberto Russell, Lautaro Ruggi, Alejo Caride, María Giacchino, Fernando Tropini, Luciano Valenzuela), dirigidos por Andrés Sahade, se convierten en narradores que buscan el cuento perdido y van armando un hilo entre las canciones compuestas por Hernán Matorra y los textos del libro, interpretando diferentes roles según los relatos que van contando.

El elenco invita al público a observar la intimidad de un grupo de músicos que ensayan las canciones y realizan efectos de sonidos para ilustrar momentos de las historias o para hacer un gag humorístico. Se crea un juego en clave de humor: a veces el sonido no era adecuado o estaba demás, o a destiempo, interrumpe una narración, acompaña chistosamente una acción o se burla de lo que están relatando.

La musicalización, además de ser excelente, es llamativa por la elección de ser bien local, rock de estilo argentino, chacarera y algunos versos rapeados. De alguna forma argentinizan un libro que tiene rasgos extranjeros, por ser escrito por Pescetti mientras aún vivía en México. En este  se reemplaza el “refresco” que toman en la playa por un “mate”, y el mate se transforma en el protagonista de una canción.

Es maravillosa la comunicación con el público, donde se rompe la cuarta pared para interactuar y preguntar un desenlace diferente para una de las historias, “¿Qué otra probabilidad hay de que salga de la caja?” (un personaje que estaba muerto de miedo, estaba encerrado y no quería salir), niños y niñas participan imaginando por qué saldría de la caja, colaborando activamente en el desarrollo de la escena, y formando parte de la obra de una manera natural y amorosa.

Las coreografías le dan dinamismo a En busca de El pulpo está crudo, el humor no está solo en la palabra y el sonido, sino también en los movimientos cuidadosamente diseñados para cada actor y actriz. El humor físico es un complemento interesante para una obra que está basada casi palabra por palabra en el libro original.

 Los dibujos en arena de Alejandro Bustos son proyectados en vivo y hacen a su vez de escenografía, ilustrando los personajes de la historia, manteniendo el estilo de los dibujos originales de O’Kif en la edición impresa del libro.

Una propuesta más que satisfactoria, un homenaje a la obra de Pescetti, para el disfrute no sólo de las infancias, sino también para el público adulto -que era más numeroso que el público infantil- para disfrutar en familia o para ir solo por cuenta propia.

Ficha

Dramaturgia: Hernán Matorra, adaptación sobre el libro de cuentos El pulpo está crudo, de Luis Pescetti

Canciones y música original: Hernán Matorra

Intérpretes y músicos en vivo: Hernán Matorra, Sol Bloise, Roberto Russell, Lautaro Ruggi, Alejo Caride, María Giacchino, Fernando Tropini, Luciano Valenzuela

Arte en arena: Alejandro Bustos

Diseño de sonido: Pablo Minici

Diseño de luces: Max Pastorelli

Diseño de vestuario: Analía Cristina Morales

Diseño gráfico: Julieta Garrós

Prensa: Kevin Melgar (0km Prensa)

Redes: Alexis Mazzitelli

Stage manager: Mariana Cecilia Bianchi

Producción ejecutiva: Rocío Pose

Coreografías y asistencia de dirección: Mariana Zourarakis

Dirección: Andrés Sahade

Género: musical