¿Sí…?

¿Cómo se transita lo que pasa? ¿Se acepta sin vueltas? ¿O se modifica la percepción de la realidad para que se adecúe a lo que se desea? Pero para modificar la realidad hay que asumir que está tiene forma, que es maleable. ¿De qué tendrá forma la realidad? ¿De perro? ¿De un calamar gigante? Dalmaro y Bruno eran pareja. Bruno se fue al centro de la tierra, a visitar la fosa de las Marianas. Dalmaro se quedó en tierra firme junto con La Neta y El Neto, sus mejores amigos.

Dividida en doce actos, la obra va construyendo  personajes con una manera cariñosa y única de vincularse, permitiendo que el público se olvide de que son actores a quienes está viendo realmente y no personas reales de su cotidianidad.

El escenario, presentado dinámicamente, abre las puertas de pequeños submundos, por un lado, se encuentra la habitación con los objetos vitales del protagonista (el bajo, la cama, algunos libros, una lámpara luna, igual de soñadora que él, y un celular) y por el otro el resto de la casa conformado por un pequeño patio y un living que solo son presentados a través de recuerdos. La separación física se hace presente, la tristeza y el abandono fueron acaparando cada uno de los rincones dejando a Dalmaro aislado en la habitación principal retratando su cotidianidad. La casa sin Bruno quedo grande.

Dentro de la vorágine de sucesos a través de los cuales la voz en off va guiando a la audiencia se ven desfilar prendas y objetos de los más coloridos. Emplean varios recursos de videos y se permiten jugar con las composiciones de los actos sin repetirse ni sobrepasarse. Pero lo que más resalta es el diseño de la iluminación, ofreciendo un poco de  psicodelia y compasión.

Al final de la función ofrecen la posibilidad de adquirir el guión en un libro homónimo publicado por la editorial Libros Drama, permitiendo enriquecer la experiencia. No es de sorprender que la obra haya ganado el III Premio Internacional Dramaturgia Invasora 2019, la tierna obra que nos presenta Jimena Aguilar logra evitar caer en lugares comunes presentando una perspectiva carismática y entrañable.

Ficha

Dirección: Jimena Aguilar

Actúan: Guido Botto Fiora (Dalmaro), Juan Tupac Soler (Bruno), Camila Peralta (La Neta), Natalia Casielles (ADSR), Matías Dinardo (El Neto).