Mujeres al borde de un ataque de risa

Vivimos en una sociedad que cada día nos demanda más. Nos sentimos sobre-exigidos por alcanzar estándares de vida, por demás elevados, en cuanto al desarrollo profesional, los roles que ocupamos en la familia –como, por ejemplo, en el caso de la protagonista: ser buena hija, ser buena madre, ser buena compañera o esposa, etc.-, el cuidado del cuerpo, el deseo de autorrealización y, desde ya, la paz interior. Hay muchas cosas para hacer. Y nada alcanza ni nos satisface en una sociedad demasiado competitiva, donde lograr la plenitud y la felicidad se ha convertido en el principal mandato.

La protagonista del espectáculo llega tarde, pide disculpas, atiende el llamado de la madre, termina de definir la escenografía con el asistente de escena, se viste, trata arreglarse lo mejor posible para la función, busca serenarse y encontrar un eje que le dé equilibrio, como buena anfitriona conecta con espectadores, les hace algunas preguntas, les pide que la ayuden, les dice que ella tiende a dispersarse y si ven que se va por las ramas que la ayuden a volver para que pueda enfocarse, tiene muchas cosas para decir, pero también hay otras que aparecen en ese momento y … en fin son muchas , muchas, muchas cosas. Así arranca este recorrido. A través de diversas anécdotas, Dalia logra pasar por los tópicos más representativos del ser mujer en la actualidad. Con mucho humor, frescura y espontaneidad -además su enorme talento- empatiza con un público que la acompaña en todo momento.

Dalia Gutmann, una de las más destacadas referentes del stand up, también actriz y locutora, logra transitar en escena todas la posibilidades que le da la interpretación: actúa, canta y baila. Con una escenografía practica y funcional transforma, en cuestión de segundos, el espacio. Nos lleva de un lugar a otro, para que el público se situé en cada una de las historias contadas. Las proyecciones, sin dudas, son un aporte fundamental en la dinámica del espectáculo: fotos de su biografía, imágenes secuenciales, gráficos e incluso un cortometraje que nos muestra cómo sería, en la fantasía, el mundo ideal para la protagonista.

“Tengo cosas para hacer” es una maravillosa propuesta para reír y reflexionar sobre algunas de las preocupaciones que se le presentan a las mujeres en la actualidad. Hace nueve años “Cosas de minas”, también creado e interpretado por Dalia Gutmann, se impuso en la cartelera teatral como un exitoso espectáculo de humor, con la misma temática. Si bien, pareciera esta una propuesta orientada para mujeres, merece ser vista por cualquier género, ya que nos invita a sumergirnos en un mundo donde algunos se sentirán identificados y a otros les ayudara a entender.

Ficha:

Intérpretes: Dalia Gutmann