El otro lado de la vida

Uno de los grandes misterios de la humanidad refiere a la vida después de la muerte, que hay del otro lado del túnel, de que forma nuestras almas pasan a la eternidad. Un inmenso planteo de las religiones, que estas tratan de canalizar, a través de la existencia de un espacio físico superior, donde nuestros espíritus transitarán para siempre. Según la teología cristiana, existe un mundo entre los vivos y los muertos llamado “limbo” que es una especie de lugar o estado temporal donde se ubican las almas que aún tienen cuestiones sin resolver en la Tierra.

En este contexto y a partir del planteo de la existencia de una vida eterna nos encontramos con tres mujeres (Cristina Alberó, Meri Hernández y Gabriela Bevacqua) que, en una fría jornada de diciembre en la localidad de New Jersey, llegan al hogar del afamado médium de nombre Jason Richards (Mariano Mazzei). Jason comparte su morada con una adorable estrella del cine (Florencia Otero). El objetivo de la llegada de las visitantes, es poder lograr una conexión con tres seres amados, que han perdido la vida en diferentes momentos y circunstancias (Laura Oliva, Elis García y Nicolás Cucaro). Con un supremo código de humor, sin necesidad de golpes bajos ni lugares comunes, con una infinita sensibilidad y reflexión sobre la muerte se desarrolla la trama de la obra.

Vocal, musical y actoralmente destacados cada uno de los intérpretes recrean a estos personajes y nos invitan a ingresar a sus mundos y a sus historias de vida. Es inevitable no emocionarse (no por nada al ingresar a la sala en cada uno de los asientos encontramos paquetes de carilina). Una emoción genuina, no sólo al adentrarse a los eventos relatados, sino también por la calidad y la calidez de los actores en escena. Con la cuota justa de humor y alegría que equilibra cada momento. Un texto sublime de Vinnie Favale y Frankie Keane adaptado por Marcelo Kotliar. Una banda en vivo dirigida por el maestro Santiago Rosso quien además ejecuta el piano y es acompañado por los músicos Martin Lozano en bajo y Maxi Cataldi en batería. Una brillante dirección del señor Diego Ramos quien coordina este elenco de manera impecable. Todos y cada uno de los artistas brillan en diversos momentos en los textos hablados y en la interpretación de las canciones. Música y letra pegadizas y conmovedoras. Se destaca la versatildad y desempeño de Laura Oliva, la experiencia y profesionalismo de Cristina Alberó, la emocionalidad y voz angelical de Florencia Otero, la sensibilidad y dulzura de Meri Hernández, la espontaneidad y fuerza de Elis García, la ternura y oficio de Gabriela Bevacqua, el desparpajo y frescura de Nicolás Cucaro, la templanza y tesitura de Mariano Mazzei.

Asistir a una función de “Quien retiene a Quien” es como subir a una montaña rusa de emociones, donde cada momento será un sube y baja de sentimientos, donde es imposible no identificarse con alguno de los relatos, donde es inevitable que no se te piante un lagrimón y largues una carcajada y donde seguramente al salir de la sala teatral te vayas a tu casa pensando en ese ser amado que te acompaña desde el más allá.

Ficha:

Elenco: Laura Oliva, Cristina Alberó, Florencia Otero, Meri Hernández, Elis García, Gabriela Bevacqua, Nicolás Cucaro y Mariano Mazzei

Dirección musical: Santiago Rosso

Dirección general: Diego Ramos