Abriendo puertas

En medio de un espacio vacío: una puerta. Un hombre, perdido, medio ciego, buscando algo, se encuentra con la puerta. Después de muchos intentos, logra abrirla y en un juego maravilloso de metáforas se encuentra con todo su mundo interno. La puerta se abre a los recuerdos del pasado, al futuro que cada vez es más chico, el miedo a la muerte, la vulnerabilidad del ser humano, el miedo a la soledad y a no encontrar lo que se está buscando que a veces no se sabe qué es.

George Lewis, un referente de la comedia física estadounidense, radicado en nuestro país hace unos años, logra poner su cuerpo a disposición de un juego maravilloso. Sí, el clown por lo general produce la risa del otro, pero un clown de verdad, conmueve y eso lo muestra Lewis en DOOR.

Bajo la dirección de Yanina Frankel, Lewis nos lleva por distintos espacios y atmósferas. La iluminación a cargo de Christian Gadea y la música de Agustín Flores Muñoz, acompañan el viaje por esos contrastes que son separados por la puerta. La puerta se cierra, el sonido termina, a veces porque lo corta otro sonido totalmente diferente, otras veces porque el silencio se hace presente. La infancia, un grupo de gente hablando sin parar, el sonido de los autos en la calle, el mar, el campo, hacen un conjunto de recuerdos… El hombre se enoja, con la puerta, discute con ella, ¡ay, esa puerta fanfarrona! Pero, ¿es la puerta? O, ¿es él mismo? ¿es el miedo a saber que la vida es una incertidumbre constante?

La puerta, como la vida, DOOR y lo que se busca, la puerta, the door y un cúmulo de todo lo que abrimos y llevamos a cuestas. El hombre y la imposibilidad de comunicarse, el hombre y el viaje a través de todo lo que rodea su vida, a veces no se sabe ni en qué idioma transmitir sus pensamientos “i´m buscando… i´m looking for”. Nos deja pensando, sonriendo y agradecidos por la generosidad de permitirse ser vulnerable.

 

Ficha:

Actuación: George Lewis
Dirección: Yanina Frankel
Dramaturgia: George Lewis/ Yanina Frankel