La torta de fondant
Ficha
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Prensa:
Ezequiel Castillo
Familia, quiero proponer un brindis
Un agasajo, un domingo, una familia. Este espectáculo de Ezequiel Castillo, desentrama los problemas familiares más reales de todos los tiempos: persuasión, orgullo, lealtad, vergüenza, amor, respeto y religión.
Una mujer se reúne con sus seis hijos para celebrar su cumpleaños, pero el festejo se transforma en una catarata de reclamos por parte de los hermanos. Ana (Giuliana Zalazar), una de las menores, vive allí y desde su rebeldía marca a cada uno de ellos falencias que encuentra. Una de las principales es como crecieron bajo un mandato familiar donde la religión era algo vital y sobre la cual no debían traicionar ciertos principios.
Alva (Matutito Ruíz), otro de los hermanos, es uno de los personajes más resonantes de la obra, quizá el más transparente, con su sutileza e ironía dice verdades que a todos le quedan resonando. Es el más apegado a Ana y quien desde el primer momento la ayuda con el agasajo.
Eliana (Ana Carolina Ferro), otra de las hermanas, es un personaje brillante ya que con su jocosidad y desparpajo hace que el espectador se sienta identificado desde el primer momento con aquella persona que además de tener su vida y familia (es la única que tiene hijos), debe ocuparse y estar pendiente del resto para que a nadie se le olvide nada. La diversión que le aporta a la obra lleva a reírse y vivir las emociones dentro de la comedia dramática viajando entre ellas.
Omar (Marcelo Salas), es uno de los mayores y se encuentra en pareja con Celeste (Agustina Depauli). Él es quién más sufre, pero también el que menos expone los sentimientos. Celeste es una joven que concurre a la iglesia y es quien más marca los defectos de sus cuñados, ella busca dejarles en claro los logros que han conseguido con Omar y también las aspiraciones que tienen a futuro. Es quién se ocupa de hacer un punteo sobre aspectos que en la religión son importantes, pero a la vez es el que despierta las críticas familiares sobre estas costumbres.
Daniel (Cesar Cardozo), otro de los más grandes y Juan (Alejandro Benítez) el menor, completan la familia. Ellos viven juntos y al concurrir a la fiesta, muestran sus deseos de hacer cambios en la casa de la infancia donde actualmente vive Ana; creen que eso cambiaría el ambiente y podrían tener algún redito para dividir a futuro ya que la casa es de todos. Ante esta propuesta Ana expone que en realidad es de su madre y no se toca, así sale a la luz un entramado familiar desconocido.
La Torta de Fondant es una obra espectacular de principio a fin que lleva al espectador a un viaje constante haciéndolo recordar esos domingos en familia donde se encontraban todos sentados a la mesa. Es una comedia dramática en la cual esta emocionalidad que genera risa y hasta nudos en la garganta se encuentra presente de principio a fin llevando a que por momentos la sala se encuentre en silencio debido a la atención e identificación que se genera.
Todos los actores logran atrapar al público pero los que más se destacan son los compuestos por Ana Carolina Ferro y Matutito Ruíz. El final inesperado de la obra hace que la emoción surja poniendo el foco y resignificando una situación particular.
Ficha
Intérpretes: Giuliana Zalazar, Matutito Ruíz, Ana Carolina Ferro, Marcelo Salas, Cesar Cardozo, Alejandro Benítez, Agustina Depauli
Dirección: Ezequiel Castillo
Género: Comedia Dramática
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