La ternura de las palabras y el amor

Un escenario en penumbras, con una niña sentada, esperando en un establo, situación cálida, que genera curiosidad. Ella es Gringuita, la única protagonista de esta historia, interpretada por Agustina Groba. Está esperando a su amiga, Suyay, mientras tiene la compañía y complicidad de una yegua blanca.

Allí sucede la obra, en el horario de la siesta, a la espera de la llegada de la amiga. Aunque los días de Suyay están cambiando, su cuerpo y su vida ya no serán los mismos.

Esta es la situación en la que se desarrolla la obra teatral escrita por la directora y dramaturga, Pilar Ruiz. “Suyay” es un unipersonal, que transcurre en los 1900, un largo monólogo donde la protagonista muestra y narra el mundo y la sociedad en la que vive. Su única compañía es un animal, a quien le confiesa sus sueños, sus miedos e inseguridades, y cómo vivencia su amistad con Suyay. El texto es de una enorme hermosura, sensibilidad, y fuertemente poético, haciendo que desde la inocencia y la voz de esa niña se ilumine y contraste el tiempo en que transcurre la pieza y la actualidad, reflejando las cosas en las que se han avanzado y en las que no. Tiene una fuerte presencia lo femenino y el amor, atravesado por la opresión de las clases sociales y la cuestión de género.

La puesta y la dirección denotan una gran búsqueda y un enorme corazón puesto en cada palabra y en cada movimiento, obteniendo un resultado bellísimo. La protagonista de esta travesía se destaca por su gran versatilidad, su capacidad de transformación y por los colores que logra con su personaje, destacando cada pasaje de la obra, siendo fresca y profunda.

La puesta de luces es precisa y acompaña perfectamente, y la escenografía es el marco perfecto para el desenvolvimiento de esta preciosa y sensorial historia.

“Suyay” es un unipersonal que merece la pena ser visto y entregarse al viaje que propone todo el gran equipo que la lleva adelante.

 

Ficha

Actúan: Agustina Groba

Dirección: Pilar Ruiz