Una tragedia griega marginal y millenial

Una leve bruma invade la sala, vapores de aguas servidas simulan provenir de los grandes desagües vertedores que conforman la escenografía.  Los detalles de musgo, residuos y cajas de vino tinto aumentan el realismo de un ambiente gris, derruido, con gusto a olvido y abandono.

Una cíclope empoderada (Iride Mockert) irrumpe en el proscenio con un pecho desnudo intentando sacar leche de él. Llevando en su carne “el peso de la narración de la historia” introduce el relato hacia la tragedia que se desatará.

Su primer diálogo es con Pamela (Camila Peralta) que no es hija de la divinidad si no que está arraigada a una vida marginal naturalizando el vivir en la basura, y enamorada de Áyax (Santiago Gobernori) cuenta alegremente sus intenciones románticas y anécdotas de adolescencia y fotolog.

Áyax, (Héroe inspirado en la Ilíada de Homero, que representa a un hombre de enorme fuerza pero carente de inteligencia) siente devoción por Helena quien no le “clava el visto” por celular pero sólo le responde con emojis.

Los giros de la trama tomarán forma mediante el Coro (Rosalba Menna), con su multiplicidad de voces y personalidades que opinarán sin filtros; el Sirena (Julián Larquier Tellarini) y Arjona (Marcos Ferrante) los secuaces de Áyax que conformarán la tríada del modelo de la masculinidad violenta y que a veces no soporta ser su propia basura.

El tinte descontracturante está encarnado por un personaje satírico que saldrá del inframundo añorando sus épocas doradas del under gay porteña. El Tío Trolo (Lalo Rotavería)  intentará seducir al género masculino para llevárselo consigo.

La puesta visual compuesta en diálogo con el artista plástico Nahuel Vecino logran entre escenografía e iluminación composiciones de claro oscuros al estilo renacentista, con luces que se cuelan entre las formas cilíndricas como único indicio de un mundo exterior.

La obra pendula continuamente entre el drama y la risa, entre lo posible y lo imposible siendo un cóctel que mezcla  un teclado con sonido de cumbia, coreografías para Tiktok, los gestos más humanos con la crudeza más animal.

Las historias que se tratan como marginales pueden ocurrir en cualquier estrato de una sociedad que base sus vínculos en la creencia de los falsos héroes, de modelos en decadencia y el amor romántico erosionado.

 

Ficha:

Con: Rosalba Menna, Iride Mockert, Camila Peralta, Lalo Rotaveria, Marcos Ferrante, Santiago Gobernori y Julián Larquier Tellarini

Dirección: Mariana Chaud

 

Género: Tragicomedia.