Memoria familiar hecha teatro

Narrar la historia propia es nuestra herramienta principal para hacer sentido de ella. Contar los espacios transitados, sus personajes y demás recuerdos es un proceso fundamental para comprenderse a uno mismo. Lorena Vega, artista ineludible del escenario teatral argentino, ha encarado junto a sus hermanos Federico y Sergio este documental de familia, profundamente autobiográfico, de título Imprenteros.

Como su nombre la indica, la industria gráfica ha sido el espacio por excelencia donde Lorena, directora y autora de la de propuesta, transitó buena parte de su vida. Asoma de este un protagonista ineludible: Alfredo, el patriarca. De su vida se desprenden un oficio, alfa y omega de la vida familiar, fuente de sus alegrías y miserias. Vega encara la reconstrucción de dicho espacio a través de distintos recursos: un proyector con fotos domésticas, videos caseros, audios. Como si del living hogareño se tratase, a los registros familiares se les suman los testimonios de los hermanos y las reconstrucciones de momentos claves de los Vega, escenificados con un poco de ayuda de eximios amigos actores, entre los que se cuentan: Julieta Brito, Juan Pablo Garaventa, Christian García y Vanesa Maja; el elenco puede cambiar sutilmente según la función, puesto que son amigos de la protagonista y su disponibilidad puede variar. Lorena, por supuesto, oficia de maestra de ceremonias, y no por ello es neutral a lo que atestiguamos los espectadores, su propia historia.

Y es que narrar al padre no es una acción ingenua. Desde Hamlet de Shakespeare hasta el peliculón El gran Pez de Tim Burton, el relato paterno es prácticamente un acto de exorcismo, de trazar la propia trayectoria, de comprender el contexto histórico social vivido. Lorena Vega introduce ingeniosamente en el texto distintos instantes que muestran las luces y sombras de quien fuera su papá, y la imprenta gráfica fue el eje que organizó la vida de Alfredo y su familia. Su profesión marcó la vida de los Vega, y de los fragmentos presenciados en escena se desprenden las ternuras, pero también las desidias, dicho de otro modo, los complejos lazos de las relaciones entre padres e hijos. Cada voz que se suma al relato aporta a dicha complejidad: madre, tíos, amigos del difunto imprentero; y el sonido de la maquinaria de gráfica también emana de sus testimonios, en un crescendo que va del ruido a la musicalidad de una vida de tintas.

Al fin y al cabo, actuación, registros caseros, sonido devenido en ritmo y hasta coreografías establecen un paralelismo entre relato familiar y la cotidianeidad de la Imprenta. Así, se reconstruye una trayectoria sumamente íntima pero absolutamente identificable para el espectador. Vega demuestra una vez más la integralidad del teatro que ha sabido interpretar, donde ficción y verdad no son opuestos inconciliables, y lo que se ve es absolutamente real y sensible al público. Imprenteros es una invitación a la emoción, al teatro vivo y la reflexión sobre nuestra historia personal.

Ficha:

Actores: Lorena Vega, Sergio Vega, Federico Vega, Julieta Brito, Juan Pablo Garaventa, Christian García, Vanesa Maja

Directora: Lorena Vega