El terror al otro.

Tilcara no existe es la historia de dos hermanas Amparo (Amancay Espíndola) y Angélica (Raquel Albéniz), nietas de burgueses terratenientes, que se sienten terriblemente amenazadas por sus ex empleadas domésticas que han sido norteñas. Por lo tanto, deciden atrincherarse en su habitación a esperar lo que sea que les depare su destino, dando ello a lugar a las más disparatadas situaciones.

La acción propiamente dicha inicia cuando ambas mujeres comienzan a notar que su apariencia física se va transformando y sus conductas habituales empiezan a colorearse de ese norte al que tanto desprecian. Todo ocurre en una misma unidad de tiempo y espacio, es decir, ellas siempre permanecen en la misma habitación. El terror proviene justamente de estímulos del exterior, el olor a comida típica que se filtra aunque intenten mantener hermético y perfumado el ambiente y la música que se hace escuchar y vibrar en los cuerpos por más resistencia que se oponga.

Si bien la obra hace anclaje en el mundo fantástico, ya que las hermanas son inexplicablemente transfiguradas por trenzas que no paran de crecer y pieles que pasan del color pálido al color aceituna, la escenografía y el vestuario se encuentran dentro del estilo realista. Por su parte, la música incidental consiste en canciones y melodías características del norte, mientras que el juego de luces es sutil y se mantiene casi parejo y constante durante las escenas, haciendo esto que todo recaiga en el trabajo actoral. Destacándose aquí la excelente labor de de ambas actrices que interpretan de maravilla el ingenioso texto.

Finalmente, Tilcara no existe es una comedia simple pero muy crítica, con acertadísimos toques de humor, que plantea una mirada ácida sobre la forma de pensar de la mayoría dentro de los sectores más acomodados de la sociedad y su pánico hacia lo popular. Para disfrutar de una impecable dirección y excelentes actuaciones.

Ficha:

Actúan: Raquel Albeniz y Amancay Espindola.

Dirección general y puesta en escena: Alejo Samban.