Tibio

La evocación como acto pedagógico de la memoria

Los libros dispersos y apilados sobre el escenario, no son una mera acumulación de objetos. Cuando el protagonista entra en escena, esos libros dialogan con los recuerdos, traen consigo una historia más allá del texto escrito. En este aspecto, a través de la novela “Niebla” escrita por Miguel de Unamuno, el profesor Joaquín Rodríguez Janssen evocará como acto pedagógico de la memoria, sus días de clase de Literatura española y la relación con los estudiantes, en particular, su nexo con el alumno Sánchez.

En cuanto al contexto, cabe mencionar que el guion de Mariano Saba nos sitúa en Argentina en 1979, años convulsionados marcados a fuego por la última dictadura militar donde el texto es sutil y la oscuridad de una época, o, mejor dicho, la niebla va a inmiscuirse de a poco hasta cubrirlo todo, develando una historia emotiva que movilizará a los espectadores.

Un escenario donde la pizarra verde en el fondo, una mesa y libros de literatura son toda la puesta en escena necesaria para recrear sus días de clase, es una decisión acertada de parte de Paola Delgado, ya que no se requieren mayores elementos para desarrollar una historia íntima.

Las emociones y los gestos expresados magníficamente por el actor Horacio Roca introducen al espectador a un universo de representaciones, desde las clases de literatura, pasando por la infancia del protagonista, hasta llegar a Beatriz, su expareja que toma cuerpo y le reclama su ausencia. En este punto, se abren una serie de interrogantes: ¿Cuál es el rol del docente en este contexto? ¿Cuáles son las posibilidades de ejercer un cambio en un contexto hostil como la dictadura? ¿Cuál son los nexos entre las diferentes historias que evoca el personaje?

En relación al vestuario, el traje y los zapatos del profesor cuadran dentro de los parámetros o las imágenes de un docente de época y en relación a la iluminación, la incorporación de la misma, contribuye a generar los pasajes hacia las diferentes historias, sobre todo, cuando el personaje principal sale de su rol docente para recordar la infancia, por fuera de los límites del aula.

Sin lugar a dudas, la actuación de Horacio Roca y la dirección de Mariano Saba son la clave para que esta obra denominada “Tibio” sea una excelente demostración de que el teatro, no es una simulación de una historia, sino, que es el resumen de la vida misma.

 

Ficha:

Intérprete: Horacio Roca

Dirección: Mariano Saba

Género: Drama

Categorías: Reseñas

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