Opresión, poesía y libertad

Abundante tela roja sirve a nuestra anfitriona, vestida de traje, para recibirnos al son de su tejer. Sin alertarse mucho, el público se dispone ante una grada con ella al centro de nuestra atención, el material de color intenso en un rincón y una pantalla para proyectar lo que será nuestra introducción a esta poética pieza dedicada al feminismo de título Stormy Red, de la española Concha Vidal.

Es el acto de tejer en rojo una tan precisa como perspicaz metáfora del cuidado lenguaje poético de la pieza. Un entramado acciones claramente simbólicas configuran un intenso manifiesto por la igualdad. Concha Vidal es acompañada por dos compañeras performers (Juana Castell y Currusca Collado) con las cuales escenifican distintos puntos del dominio del patriarcado en la vida de la mujer, mediante actos diversos: danza, el propio tejido de la opresión, la interpelación directa al público con discursos repetidos en distintas intenciones. Todos estos momentos calan profundamente en la sensibilidad de un espectador atento, sumado al compendio de metáforas accesibles y claras que, con incomparable astucia, la realizadora conjuga sin necesidad de recursos crípticos y con un pedagógico objetivo de comprensión e impacto en la platea.

Las tres artistas exhiben a su vez una potente formación que les permiten conjugar una poética teatral pocas veces vista en escena: monólogos, danza, canto a cappella (con mínimas intervenciones de audio en off) y fogosas interacciones entre ellas y su público. Todo esto, en una Buenos Aires sensible como nunca a los nuevos desafíos de la problemática de género. Así, somos invitados a un espectáculo que resulta una suerte de ABC del despertar feminista. No faltan, entonces, el descubrimiento de la trama de opresión (de vivaces hilos rojos) que reviste el patriarcado, la violentación de la mujer como subordinada del hombre, el auto descubrimiento del género y, por último, la tan mencionada muerte al macho, a la figura opresiva que, lejos de ser un canto en contra de los hombres, como erróneamente se puede pensar, es el fin simbólico y cultural de una estructura social que oprime tanto a hombres y mujeres por igual. “Si ya tenemos padre”, reza la obra, “nos toca darnos la libertad los unos a los otros.

En el marco del ciclo cultural Transatlántico¸ tuvimos la oportunidad de acercarnos a este manifiesto de libertad de Concha Vidal, en una Argentina ávida de reescribir su cultura política desde todos los flancos, desde la calle, hasta las tablas. Stormy Red es, por lo tanto, una victoria en la composición de esta nueva cultura, productora de una poética clara como bella en pos de la igualdad, un conciso poema teatral que conmueve con inteligencia a la platea y la vuele cómplice de su afán por una sociedad igualitaria.