Pieza para maniquíes y un actor de reparto

Pieza para maniquíes y un actor de reparto

Ficha

  • Datos de funciones:

    Información sobre las funciones, en la cartelera

  • Prensa:

    Prensópolis

 

En las afueras de la palabra

Tres sillas construyen expectativa en un escenario pelado. Ingresan Pablo Maidana, Luciano Mansur y Guillermo Tassara. Hablan en términos críticos mientras una luz ilumina sus rostros maquiavélicos, proyectando sus sombras. Sus palabras versan justamente sobre la prisión del lenguaje, e inmediatamente renuncian a la linealidad narrativa teatral: éste será un espectáculo esencialmente experimental, particularmente espectacular (en el sentido más estricto del término). Lo que sigue será una serie de escenas visualmente provocadoras, un despliegue de todo el arco de la teatralidad sensorial, desde la máscara, hasta el títere, pasando por el teatro negro. Ana Alvarado, directora, toma las riendas de esta atractiva apuesta titulada Pieza para maniquíes y un actor de reparto.

Los cuadros que se suceden son justamente ese despliegue de talento sensorial con que los protagonistas despliegan esa batería de recursos tan impactantes. Acompañan en ellos diferentes elementos, como lo son muñecos, caretas, marionetas (todo parte de la precisa escenografía y vestuario de Gabriella Gerdelics), y pequeños monólogos entreverados. Sus palabras son de a momento crípticas y un tanto esquivas para la audiencia, pero justamente en pos de la renuncia inicial que el texto realiza del sentido de la palabra. Cada acción, cada término, cada movimiento (crédito a Soledad Perez Tranmar) remiten a otro significado, uno necesariamente conexo, pero cuidadosamente seleccionada, porque el sentido está desbordado. Lo críptico textual será sin duda contrastado por la corporalidad intensa e impresionante (por su claro fin de impresionar). Cabe destacar que esto se aprecia gracias el brillante diseño de iluminación (a cargo de Malena Miramontes Boim).

A este cuadro complejo de teatralidad experimental se le suman dos elementos clave. Uno de ellos, el diseño sonoro que acompaña la obra (de Cecilia Candia) , le otorga a la pieza un aura de intriga, una curiosidad sembrada en la audiencia sobre qué vendrá luego, con tintes suspensivos. El otro elemento, la mirada de los artistas, suma a la interpelación constante de la platea. La provocación no solo se hace carne en preguntas directas al proscenio sino en la conexión que los actores realizan a través de sus ojos, un portal a ese imaginario audaz de esta obra.

Apuntado quizás a un público más conocedor, Pieza para maniquíes y un actor de reparto exhibe un espectáculo complejo y de a momentos enigmático, pero con una invitación abierta a toda audiencia desde lo visual. Entre el juego y la ciencia, la obra toma el arte de lo teatral como una excusa para lo espectacular.

Ficha:

Actores: Pablo Maidana, Luciano Mansur, Guillermo Tassara

Directora: Ana Alvarado

 

 

Categorías: Reseñas

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