Las vueltas de la vida

En la vida a veces no terminamos de conocer a la gente, aun a las personas que más cerca están de nosotros.

Son en situaciones límites donde se ven a las personas tal y como son. Solo la verdad puede lograr eso.

Una mujer espera por su hermano que ella creía muerto. Su amiga de toda la vida la acompaña para esperar por ese momento especial que le cambiara la vida. Pero no solo será ese hecho el que modifique el presente para siempre. Hay algo más.

“Nuestras fotos” refleja todo eso, reflexionando sobre nuestras reacciones al ver las verdaderas caras de aquellas personas que creíamos que eran tan especial en nuestra vida, amigos, hermanos, padres.

Daniel Santos es quien escribió este texto, cargado de amor, ternura, amistad, hermandad, verdad, mentira, traición y un final inesperado y espectacular.

La dirección a cargo de Alicia Verón es maravillosa. Cada momento del espectáculo es increíble, con tres actores que son los indicados para interpretarlos.

Elena Brozzo, Andrea Lobo y Walter Basili son los tres protagonistas de la obra. Juntos hacen un trabajo único, muy real, encarnando la relación de amigas y hermanos con tanta naturalidad, que es de gran admiración y grandeza. A lo largo de la obra viven instantes de suma felicidad, tensión, violencia y sorpresa.

Elena encarna a la amiga, la fiel compañera, que es capaz de hacer lo que sea por su hermana de la vida. Andrea es quien espera por su hermano. Empresaria, joven, exitosa, pero nada de eso importa si no está cerca su hermano. Walter es el hermano recién llegado de España.

Es increíble la actuación de Walter, hablando español a la perfección. Andrea hace un papel encantador, dulce, tierno. Elena en escena es un lujo, un personaje que tiene todos los matices, transformándose de manera constante.

El hecho gira en torno de un departamento, con algunas sillas y sillones, una mesa, café. En ese pequeño espacio se va a saber toda la verdad. Un escenario pequeño pero aprovechado al máximo, aun mas en instantes elementales de la obra, con un despliegue único de los actores que forman parte de este hermoso espectáculo.

El vestuario es oportuno para cada personaje, con todos los detalles que marcan la edad, la forma de ser y el aspecto que ellos tienen.

Un espectáculo distinto, que cuenta una historia muy particular, que debe ser contada.