Suena un clásico de fondo

El dispositivo teatral de “Nina”, recibe al público cálidamente, lejos de la clásica escena a la italiana a la que estamos habituados (escenario y butacas enfrentadas), en este caso hay sillas distribuidas por toda la pequeña sala y cada uno se ubica donde quiere vivir la experiencia, es así como los espectadores se vuelven parte de la historia, son protagonistas de lo que allí ocurre.

La escenografía se completa con percheros, una escalera, un piano, pequeñas mesitas… el espacio se transforma en los guardarropas de un teatro. Por una de las puertas, llega la protagonista, con un vestido violeta con delantal blanco, que nos ubica a principios del siglo pasado. Muy sonriente y fresca, comienza a hablar y cepillar los abrigos. Es Nina… o la gaviota, tal como cuenta que le dicen.

Se siente un rumor, son los actores que están en la sala interpretando ¨Las tres hermanas¨ de Chejov y cuando sube un poco la intensidad, llega a escucharse en el vestidor, esto le da paso a la protagonista a contarnos de que se trata y le sirve de pie para contar que ella también es actriz y está esperando su oportunidad, mientras sigue ahí, haciendo su tarea con alegría. Pero claro una cosa lleva a la otra, un  comentario a otro y este a un recuerdo que genera un efecto cascada y Nina, cuenta cosas de su vida, se deja ver.

Un hermoso y sentido trabajo de Ana Padilla, se pone en la piel que muestra una sonrisa, pero deja entrever una pena, algo que la lastima tan profundamente que prefiere tratar de ignorarlo, un sueño incumplido y la esperanza de realizarlo, amores y frustraciones del pasado que se reflejan en su día a día, pero a pesar de todo se planta con optimismo y buena energía ante la vida.

Ana se desempeña con soltura, compone al detalle y realmente logra generar un clima en el cual todos los presentes se sienten parte de lo que ocurre, ubica a todos en tiempo y espacio con simpatía y sin quedarse quieta, salvo en algunos momentos muy puntuales, Nina habla sin dejar de hacer su trabajo.

Un espectáculo íntimo, cálido con muy buenos trabajos tanto en la actuación como la dirección, a cargo de Jorge Diez; una manera diferente de comenzar la semana.

Ficha:

Ana Padilla como Nina Sarechnaia
Dirección General: Jorge Diez