Manuel Carrasco. Gira La cruz del mapa

Manuel Carrasco. Gira La cruz del mapa

Ficha

  • Datos de funciones:

    14/2 Gran Rex

  • Prensa:

    Universal Music

 

Justo en el centro

Se supone que como comunicadores, tenemos que tomar distancia de aquello de lo que hablamos, objetivar nuestros comentarios, pero sabemos que eso en muchos casos no es posible, incluso es contraproducente, sobre todo cuando se trata de hablar sobre arte, cuando apuntamos a tener una mirada sensible de lo que vemos, esto sin dudas está completamente atravesado y permeado por nuestra subjetividad; es por eso, que en esta oportunidad, voy a dejar de lado los formalismos y voy a hablar en primera persona, en lo que viví en el show del Gran Rex.

El pasado 14 de febrero, Manuel Carrasco, se presentó en la calle Corrientes, como parte de su gira “La cruz del mapa”. El artista andaluz, brindó un show que duró más de dos horas y media, ante un teatro que tenía sus casi 3300 butacas ocupadas.

Realmente estoy habituada a asistir a diferentes espectáculos y sé que, con llegar treinta minutos antes, puedo retirar mis entradas tranquila y luego simplemente aguardo a que den sala, para ocupar mi lugar. En este caso, pase una hora antes de la hora señalada y la gente iba de esquina a esquina al 800 de la avenida que nunca duerme, la cuadra del espectáculo estaba llena de público emocionado, que ya desde ahí, cantaban los temas del español como preludio a lo que vendría.

En lo personal descubrí hace poco más de dos años a este artista y poco a poco, su música me fue cada vez más cercana, la simpleza y profundidad que tienen sus canciones, sumadas a su forma tan particular de decir, hacen que hoy disfrute a diario de la ch arrastrada tan típica.

El show fue un recorrido por su carrera, haciendo temas que empezaron a ser un éxito hace años y otros de su último disco (el que le da nombre a la gira), el público coreo y bailo todos sus temas, de principio a fin, solo se mantuvo sentado en algunas baladas.

La efusividad de la platea sorprendió a Manuel en más de una oportunidad, muchas muestras de “amor” llegaban a viva voz, desde todos los rincones del teatro, logrando incluso que más de una oportunidad se sonroje e incluso, que, entre risas, pida “un poco de cordura por favor”.

El espectáculo conto con tres perlitas, primero, un homenaje a Sabina (quien el día anterior, justamente el día que cumplió 71 años, tuvo un accidente en un show), otro español mimado por los argentinos; así fue que solo, con su guitarra, comenzó a cantar… sentados en corro, merendábamos besos y porros… poco a poco, los presentes se sumaron (nos sumamos) y fue un momento mágico.

Por otro lado, hizo un tema compuesto para los argentinos, hablando de nosotros, nuestros lugares y costumbres, de la platea se escuchaban permanentes “ole”, fue un regalo que se agradeció como correspondía. En general los artistas hablan de lo especial que es el público argentino y es normal preguntarse si lo dicen en serio o solo para quedar bien, pero con este gesto, algo más está diciendo.

La tercera, fue un momento casi impensado en el contexto, Manuel canto a capela, con su guitarra y sin micrófono, logrando un emocionante silencio en la sala, que se rompió cuando estallaron los merecidos aplausos.

Un show en el que toda la banda se brindó al cien, donde hicieron un recorrido cantándole al amor, a todas las clases de amor, de pareja, de padre, de hijo, de amistad, a la vida, como así también, siendo una oda a la autenticidad, al agradecimiento y a la vida, a enfrentarla con la frente alta y el corazón abierto.

Así fue que con un muy enérgico David Carrasco a la cabeza, lo músicos Roberto Lavella, Francois Le Goffic, Christian Conch, Marylin Ramirez y Javier Lozano, acompañaron a Manuel, extendiendo el show con varios bises, hasta que no les daba más el cuerpo y el mismo cantante, pidió por favor terminar, haciendo gestos que el cuerpo ya no le daba. Una banda increíble, con mucha onda y todo el power, músicos que le dieron vida al show, sin dudas una parte fundamental del espectáculo; queda claro que Manuel es con y por ellos y viceversa.

La puesta fue muy potente tanto en sonido, como iluminación y el complemento de pantallas reforzando las historias que se cantaban en vivo; mucho power desde lo visual y auditivo.

Por mi parte, viví una fiesta, disfrute de un espectáculo internacional de gran nivel tanto en lo profesional como lo humano, el clima que se generó en el Gran Rex fue mágico.

Si los artistas españoles se caracterizan por algo, es por el sentimiento que ponen en lo que hacen, solo hace falta ver algún show e flamenco, para entender, que lo que hacen, lo sienten desde la planta de los pies a la cabeza, pero la pasión y calidez que suman los andaluces, realmente, hace que su arte llegue sin barreras.

Un show que reafirma a Carrasco en el punto central de la cruz del mapa de la música española, un espectáculo que simplemente hizo que musha gente vibre en la misma sintonía y se vaya cantando de la sala, con la energía renovada.

¡Que viva la música… y olé!!!

 

Ficha:

Manuel Carrasco (voz y guitarra),David Carrasco (director musical y multiinstrumentista), Roberto Lavella (guitarra), Francois Le Goffic (guitarra), Christian Concha (batería), Marylin Ramirez (bajo) y Javier Lozano (teclado)

Alberto Ruíz Martinez (técnico PA) Jesús Javier Fernández (técnico de iluminación) Mario Martínez Alonso (técnico monitores) Aitor Sánchez-Crespo (production manager) Antonio Gil Casas (backliner) José Miguel Ales de Pueyo (asitente) Carlos Espinosa (manager)

Universal Music

Categorías: Musicales, Reseñas

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