Romantizando la muerte

Madre hay una sola – Dos sería demasiado la comedia  dirigida por Hernán Bonsergent que resignifica la muerte desde la óptica del humor logrando que los espectadores rían de principio a fin.

Betty (Marta González) es una señora que ha perdido recientemente a su marido Antonio y tras enviudar lleva el duelo, desde una mirada de paz sabiendo que hizo todo hasta ese momento. En el living comedor de ese departamento que compartió con su marido, Betty charla con una de sus amigas (vía llamada) y resignifica la muerte paso a paso, haciendo por momentos que los espectadores piensen en porque se sufre la perdida de ese ser querido.

Carolina (Lorena Paola), su hija, llega de España cuatro días después del entierro y tras reproches de su madre se da cuenta que él Antonio se encuentra en una urna cineraria en el living de aquel departamento. Tras el shock que le produce tener que comunicarse con su padre de esa forma llegando a pensar que el mismo le responde, Carolina, comienza una charla a fondo con su madre y desde allí en adelante ambas destraban cuestiones que eran sabidas pero tenían cayadas.

Infidelidades, orientación sexual y los deseos a futuro son temáticas que se toman como hilo conductor en este espectáculo. Betty decide contarle a su hija las reiteradas infidelidades de su padre, mencionando que en el pasado, las mujeres no decían nada cuándo las engañaban, remarcando como ahora todo es diferente. Carolina por su parte le hace una doble confesión a su madre haciéndola ir desde los nervios a la alegría de un momento a otro.

Lo más destacable del espectáculo es la interacción de las actrices con el público haciendo que la risa se mantenga constante de principio a fin como también el feedback que tienen sobre el escenario haciendo notar dentro de la naturalidad con la que actúan que hasta se juegan a improvisar en ese momento.

El personaje de Marta González es a resaltar ya que mantiene le hilo conductor con sus expresiones en todo momento, Lorena Paola por su parte con su gestualidad hace que no hagan falta palabras para entenderla. Es una obra muy recomendable ya que genera una identificación con ambos personajes y su relación madre e hija.

Para finalizar la escenografía de Sandra Francois acompaña a la perfección todo lo que transcurre en el living y cocina de ese departamento.

Ficha:

Director: Hernan Borsergent

Actores: Marta González y Lorena Paola

Género: Comedia