El último de los zares

En una habitación de pensión, humilde y descuidada, se aloja un hombre  que pareciera estar deprimido o apático. Bajo un viejo acolchado, sin querer salir de la cama, intenta resguardarse del mundo. Hace un tiempo atras, huyó de su pueblo: San Antonio, sin dejar señales, sin que nadie supiese dónde se encontraba.

Con una colección de la revista “Todo es historia” guardada en el ropero pasa sus días en soledad. Un día aparece una mujer que dice ser su prima, con un vestido antiguo -digno de la aristocracia europea-, le pide que vuelva, le habla de un viaje a Rusia, de una herencia y de la necesidad de casarse con una princesa que aguarda su confirmación.

De pronto, nuevos personajes entran por la puerta del cuarto para sumarse a una situación que se vuelve, por momentos, absurda. La realidad y la ficción se funden en una línea no del todo definida. La historia de la princesa  Anastasia Romanov, única sobreviviente de la familia de los zares, que fueron fusilados en el año 1918 en manos de los bolcheviques, toma relevancia cuando ella misma aparece en escena. En una atmosfera, entre lo onírico y lo realista, la obra- magníficamente escrita por Victor Winer- se consolida en cada escena.

Mariano Dossena, quien dirige la puesta con gran precisión y solvencia, supo captar la esencia de esta pieza teatral. El humor está presente en todo momento. Tanto los climas como las imágenes -potentes y efectivas-, hacen que el texto brille. Las actuaciones son sólidas; cada uno de los personajes están perfectamente caracterizados. Sin embargo, cabe destacar la actuación de Ana María Cores -en el papel de Anastasia-, personaje aristocrático e hilarante. Así como también, la interpretación de Maria Viau, encarnando a la prima de Guillermo, el protagonista de la historia.

La escenografía, configurada como un bello cuadro donde el vestuario y el diseño de luces se complementan de manera armoniosa, conjuga de manera acertada una amplia gama de matices que realzan la escena.

Todo en esta obra funciona de maravilla: el texto, la dirección, las actuaciones y la escenografía. Es una muy buena oportunidad para disfrutar de una historia que nos hará reír, en ocasiones reflexionar, y finalmente nos sorprenderá por el desarrollo inesperado de su trama.

Ficha:

Intérpretes: Ana María Cores; Cristian Thorsen;Maria Viau; David Midanson y Carolina Ferrer

Dirección: Mariano Dossena