La tiendita del horror

La tiendita del horror

Ficha

  • Datos de funciones:

    Información sobre las funciones, en la cartelera

  • Prensa:

    Varas Otero

 

Seymour…. ella tiene hambre!

Una florería que otrora habrá dejado su ganancia… pero seguramente eso fue hace mucho tiempo. Lo que se ve ahora es un negocio venido a menos, con solo un par de tachos con flores de dudosa frescura. El señor Mushnik (Juan Denari), su dueño, es la fiel imagen de su comercio y ese día decidió informarle a sus empleados Seymour (Fede Couts) y Audrey (Luli Chouhy), que va a bajar la persiana para siempre, pero sus variopintos empleados, lo convencen de no hacerlo y apuestan a que una extraña clase de planta que el muchacho está cuidando, puede salvarlos.

Al parecer el pálpito tuvo asidero, porque este extraño espécimen llamado Audry II (¿a qué no adivinan quién le puso el nombre, porque estaba enamorado de su compañera?), porque ni bien la expusieron, el negocio remonto de manera notable, la planta se volvió el centro de atención de Skid Row, el pequeño pueblo en el que ocurre la acción.

Mientras todo parece brillar en la florería, la pobre Audry sufre los arrebatos de su novio Orin… el dentista motoquero, quien justamente eligió su profesión, para hacer sufrir a los demás, de manera legal. Un personaje desopilante, encarnado por un genial Mike Chouhy, quien le pone la piel a siete personajes más, logrando sacar provecho de cada uno.

Audry II es sin dudas muy especial y si bien costó descubrir que necesitaba para ponerse grande, fuerte y ¿bella?, su dedicado dueño logró descifrarlo, establecieron un lazo tal que se entienden, a la perfección; ella hace berrinches, no hace más que reclamarle comida y siendo que su dieta es un tanto particular, pone a Seymour en una encrucijada.

Este musical tiene la particularidad de contar con un grupo de relatoras, el trío vocal “Vocat”, integrado por Paula Chouhy, Juana Silveyra y Belén Bilbao, ocupan de ese rol; mientras cuentan que pasa, juegan a ser “las chicas del barrio”. Simplemente son arrolladoras, increíbles intérpretes que no solo cantan, sino que bailan maravillosamente y como si eso fuera poco, actúan, brillantes… no hay más que decir.

La pareja protagónica se luce y se complementan, Fede en clave más humorística, compone a un chico tímido sin dejar de explotar lo vocal e interpretativo, mientras que Luli cada vez que canta, sorprende con su caudal y calidad vocal. Se complementan muy bien y logran el contrapunto necesario para que este dúo funcione.

Con muy buenos juegos escenográficos, paredes que suben y bajan, se van armando los diferentes espacios y momentos de la historia, mostrando no solo la florería en decadencia y su apogeo, sino también el consultorio de Orin y la calle; todos muy logrados, dejando como centro de la escena, a la verde protagonista indiscutida.

El vestuario grita “década del 50”, típicos vestidos para las chicas, algo un poco más jugado para Audry y ellos son definidos por la ropa, Seymour tímido, algo sin gracia, entre las sombras e inseguro, mientras que el dentista con jopo, cuero y desenfado a lo Elvis. Ellas tienen varios cambios, con hermosos y coloridos diseños.

Los actores están acompañados por una banca en vivo, compuesta por: Agustín Gallo Pinedo (teclado 1), Javier Muller (teclado 2), Mariano Homps (guitarra), Martín Lozano (bajo), Maxi Cataldi (batería) y la dirección de Mariano Barreiro. Definitivamente su presencia genera climas, recorriendo desde momentos livianos, hasta otros más hondos y tensos. Una gran banda.

Si hay música, hay baile y la encargada de eso es Natalia Mezzera, quien creó divertidas coreos que, así como las canciones, acompañan la curva dramática del espectáculo.

La mano maestra que está detrás de todo es Axel Jeannot. Su trabajo es impecable, no solo lidia con los tres elementos típicos de un musical, sino que además entra en juego un títere (de quién podrán saber más yendo a conocer la tiendita), que tiene características muy particulares; de hecho, para darle vida trabajan dos personas (Iñaki Agustín y Máximo Pérez Artusi), lo que complica un poco más la puesta.

Axel abre el telón y presenta un musical con la precisión de un relojero, cada cosa funciona como y cuando debe, dando lugar a las otras, el juego se abre y todo es impecable.

“La tiendita del horror” es un musical de culto y no defrauda, una puesta de alto impacto y efectiva por donde se la mire. Audrey II es una planta muy particular, lo único que quiere es que su dueño la alimente y a cambio le promete fama y fortuna… ¿qué hará Seymour eta vez?.

Ficha:

Fede Couts – Seymour

Luli Chouhy – Audrey

Mike Chouhy – Dentista

Iñaki Agustin – Audrey II

Paula Chouhy – Ronnette

Juana Silveyra – Crystal

Belén Bilbao – Chiffon

Juan Denari – Mushnik

Máximo Perez Artusi – Titiretero

Teclado 1: Agustín Gallo Pinedo

Teclado 2: Javier Muller

Guitarra: Mariano Homps

Bajo: Martin Lozano

Batería: Maxi Cataldi

Dirección: Axel Jeannot

Dirección coreográfica: Natalia Mezzera

Dirección musical: Mariano Barreiro

Dirección de arte: Santiago Fernández

Género: Musical Humor

Categorías: Reseñas

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