La madre del desierto

La madre del desierto

Ficha

  • Datos de funciones:

    Info en nuestra cartelera

  • Prensa:

    Marisol Cambre

 

El destete

Las creencias populares nacen de hechos que sucedieron en la realidad, pero que luego, con el correr del tiempo, tras haber sido transmitidos en forma oral de generación en generación, se van modificando hasta quedar transformados en una especie de relato mítico. Esto es lo que sucedió con la historia de la difunta Correa. Cuenta la leyenda que Deolinda Correa fue una mujer que, aproximadamente en el año 1840, salió caminando por el desierto sanjuanino camino a La Rioja, en busca de su marido quien fue llevado en contra de su voluntad a pelear junto con las tropas del caudillo riojano Facundo Quiroga. Pero esa mujer no iba sola, llevaba junto con ella a su pequeño bebé. Caminó prácticamente sin rumbo varios kilómetros por el árido desierto y cuando se quedó sin provisiones, se acurrucó junto con su bebé debajo de un algarrobo donde unos arrieros, horas después, la hallaron muerta. Pero lo más sorprendente de la historia es que su bebé todavía estaba prendido a su teta de la cual todavía brotaba leche.

A partir de este tan extraordinario hecho Ignacio Bartolone realizó de una manera muy original la dramaturgia de La Madre del desierto, obra que fue coproducida por el Teatro Nacional Cervantes y estrenada en el año 2017. En la versión actual puede verse una impecable interpretación de Deolinda a cargo de la multipremiada Alejandra Flechner y una sorprendente actuación de Juan Isola, quien con su imponente presencia y su atronadora voz, paradójicamente hace de “el bebo”, el hijo de la difunta que relata lo sucedido en esa travesía por tan hostil paisaje.

La obra transita por momentos de comicidad, de ironía, con referencias a la historia de esa época y sus personajes (como por ejemplo Sarmiento, del cual se citan algunos textos de sus obras literarias) sin dejar de lado los guiños que tienen que ver con el contexto sociopolítico de la actualidad.  También tiene pasajes cargados de una expresividad poética conmovedora, apoyados por los dos músicos presentes en la escena desde el principio de la representación, quienes ambientan las situaciones.

La escenografía, la iluminación, el vestuario y demás elementos de la puesta en escena se conjugan armoniosamente para recrear este mundo de ensueño, que tiene algo de irreal, que tiene bastante de mito, en el cual los márgenes entre la realidad y la ficción son difusos.

Una obra que deja en claro que los mitos populares con el tiempo se resignifican y permiten múltiples lecturas desde ópticas muy variadas.

Ficha:

Actúan: Alejandra Flechner, Juan Isola

Dirección: Ignacio Bartolone

Género: Comedia dramática

 

Categorías: Reseñas

Escribe un comentario

Only registered users can comment.