Traición y sed de venganza

La escena nos sitúa en aquel ambiente primitivo y hostil de principios de siglo XX donde el culto al coraje y al valor se medía solo a fuerza de cuchillo. Sangre, luto y encubrimientos emergen  para hablar de un amor enfermo,  del odio, de las rivalidades y de los  enfrentamientos a las imposiciones y a los mandatos en el seno de una familia porteña. La tragedia griega se traslada y emplaza en Palermo, orillas de un arrabal, zona protegida y reservada para  guapos y malevos, para los desplazados y los matones que solo sabían habitar en estado de duelo.

Una riña de gallos sirve como paralelismo y metáfora de la situación social en la que se vivía por aquella época. Cuerpos confrontándose y debatiéndose a contraluz que finalmente devienen en muerte. El espacio con sus luces recrean y presentan los distintos planos y secuencias que ocurren en la historia. Luego de un duelo, se organiza el velorio de Pancho Morales, prototipo del guapo-matón que  indiferente y ciego  carece de emoción y empatía para con los demás, sobre todo con su familia. Amor, odio y  desprecio se transforman en obsesión para su hija, Elena, que será la obstinada alentadora de la venganza.  Se sentirá  la única y legítima viuda e instigará a su hermano  Orestes  para que sea el brazo ejecutor. El espectador será testigo de las obsesiones e infidelidades (Por parte de Nélida y Vicente; esposa y mano derecha del caudillo) de los flash-back que  enlazan y construyen  la trama argumental.  Tanto en  el resultado de las actuaciones y el de la puesta en general  que logra sostener el ritmo de la tragedia,  se aprecia el profundo estudio y amor por los clásicos de parte del director.

Como almas que representan la conciencia, librando una guerra, una vorágine de destrucción envueltos en ese aspecto oscuro de la naturaleza humana, se muestra el coro que verdaderamente ofrece la partitura de la obra.

Ficha

Dirección: Antonio Leiva

Elenco:

Elena: Yamila Gallione

Orestes: Javier Salas

Nélida: Tamara Cynthia Paganini

Pancho Morales: Omar Ponti

Santiago Soriano: Juan Pablo Rebuffi

Vicente: Hermes Molaro

Delegado: Juan  Carlos Uccello

Teresa y la vieja: Roció Belén Moragues

Coro: Rocío Belén Moragues, Érica Ruiz, Enzo Abel Duprè, Cristian Emmanuel Frenczel.