Voces y sonidos profundos
La música tiene la posibilidad de transportarnos por sensaciones conocidas o abrirnos a otras nuevas. Hacernos entrar en la eternidad que se genera en esa musicalidad y permitirnos disfrutar de los colores y sentidos de esos sonidos. Sin saber cómo explicarlo, en ese mismo momento y en el silencio posterior, uno siente algo parecido a la felicidad. Quizás, ni más ni menos que, la conmoción de plenitud que produce el arte.
Esas emociones, que intentan traducirse en palabras, como si eso fuera posible, se percibieron en la presentación en Buenos Aires del tercer disco de la compositora e instrumentista cordobesa Clara Cantore.
“Calma”, su último trabajo, y temas clásicos de la música popular, se sintieron en el Club Atlético Fernández Fierro. La particular e intensa voz de Clara, esta joven perteneciente a las nuevas voces del folklore, dejó en el aire una brisa de aquellas voces aguerridas del flamenco, al mismo tiempo que sus manos ejecutaron con maestría y gran empatía la guitarra criolla, el bajo y el ronroco.
Generando una intimidad con el público en la presentación de cada tema y en el transcurso de los mismos, Clara invitó a conocer delicadamente la historia de Florcita y a disfrutar de la Calma, de Normal, sin perder de vista al Caminante de las estrellas. Asimismo, Georgina Hassan fue invitada a compartir con ella el escenario y a encarnar de manera conjunta la canción popular gallega “Fui a fonte” del primer disco de Hassan y Ramona de Cantore. Momento soberbio en el que ambas voces y cuerpos se hicieron presentes.
Clara Cantore es una artista joven, pero con un camino y una proyección grande porque, así como su padre le enseñó a amar la música, ella en el ritual que envuelve cada una de sus canciones se lo enseña al público. ..Su música nos conmueve hondamente a imágenes de otros universos.
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